RTVE sale cada vez más cara a los españoles. En plena caída de la audiencia, que ha tocado mínimos históricos tanto en el caso de La 1 como de la Corporación, la televisión pública cuesta al año 20 euros a cada español.
Si se tiene en cuenta así un hogar medio, de cuatro personas, el coste sería de hasta 100 euros anuales en un momento en el que el público ha decidido desenganchar y cambiar a otras opciones. Y todo ello teniendo en cuenta además que tiene una plantilla de 6.500 trabajadores, -el doble que Atresmedia y Mediaset juntas- siendo la quinta de Europa con más empleados a pesar de registrar datos de audiencia mucho peores.
En la gran mayoría de Europa los canales públicos se financian a base del pago de un canon por parte de los ciudadanos. En Reino Unido, por ejemplo, para financiar la BBC cada ciudadano que posee un equipo capaz de reproducir o grabar contenidos debe pagar aproximadamente unas 145 libras al año. En Francia el canon ronda los 120 euros al año. Pero todo ello en un contexto completamente distinto, en el que las televisiones públicas tienen mucho más prestigio y reconocimiento que en el español.
RTVE se financia principalmente a base de las partidas aprobadas por el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Así, la televisión pública va a disponer en 2022 de 445 millones de euros, un 17% más que entre 2018 y 2020. Y todo ello en un momento en el que las estimaciones del Gobierno apuntan a que la deuda alcanzará los 588 millones, un 61,5% más que lo registrado hace un año, a cierre de junio de 2021, cuando el endeudamiento fue de 364 millones.
RTVE contó con un presupuesto total de 986 millones de euros, una cantidad que la coloca en la posición novena de 21 corporaciones analizadas
Es una situación financiera que se agrava, además, por los números rojos de los últimos años. Las pérdidas de 2020 se elevaron a más de 31 millones de euros ligeramente superiores a las del ejercicio anterior (29,6 millones de euros).
Forta, la Federación de Organismos o Entidades de Radio y Televisión Autonómico, ha elaborado junto a la Universidad de Santiago de Compostela un informe donde analiza la situación de los medios audiovisuales públicos europeos. En 2019, últimos datos que recoge, RTVE contó con un presupuesto total de 986 millones de euros, una cantidad que la coloca en la posición novena -de 21 corporaciones analizadas- justo por debajo de la televisión danesa, que tuvo un presupuesto de 991 millones y por encima encima de la holandesa, que obtuvo una financiación de 987,8 millones.
129.000 empleados en Europa
Con estas partidas presupuestarias, además de comprar y producir contenidos, se mantiene a una plantilla, otro dato que vuelve a variar mucho de un país a otro. Según datos que recoge Forta las radiotelevisiones públicas tienen una plantilla estable de 129.000 trabajadores, con una edad media de 53 años.
En lo que corresponde a RTVE la plantilla es de aproximadamente 6.500 personas. Se trata de la quinta corporación por número de empleados, un ránking que lidera la televisión alemana. Los dos canales públicos germanos, ARD y ZDF (son independientes entre ellos), emplean a más de 25.000 personas. En segundo lugar se encuentra la BBC con una plantilla de más de 22.300 personas. La Rai y la televisión francesa ocupan el tercer y cuarto puesto con 11.591 y 10.316 trabajadores respectivamente.
Pierde un 30% de financiación
Las radiotelevisiones autonómicas han perdido cerca del 40% de sus ingresos en la última década con respecto a la evolución del PIB de las distintas comunidades autónomas, según el informe elaborado por Forta. En el mismo se apunta que la radiotelevisión pública en España ha perdido un 30% de financiación en la última década a pesar de su elevado coste por habitante y la caída de las audiencias.