
El petróleo ya cae un 14% desde máximos mensuales. Sin embargo, este descenso puede profundizarse en los próximos días. Las dudas sobre China y la cantidad de oro negro almacenado en los tanques de medio mundo amenazan con enviar al crudo mucho más abajo. En la sesión de hoy, el barril de West Texas lucha por mantener los 42 dólares, mientras que el de Brent lo hacer por sostener los 46 dólares.
Desde Goldman Sachs creen que el precio del petróleo podría caer drásticamente mientras el crudo refinado siga llenando los tanques de almacenamiento. Según la entidad financiera, estos macro-tanques están cerca de su máxima capacidad, explican los expertos en el análisis recogido por la agencia Reuters.
Aunque parece poco probable que el exceso de crudo sobrepase la capacidad de los tanques, el almacenamiento de petróleo es demasiado alto. El punto de equilibrio (donde se juntan oferta y demanda) está muy lejos, lo que otorga al crudo muchas posibilidades de protagonizar fuertes caídas a corto plazo.
La capacidad de almacenamiento
"La capacidad de almacenamiento de crudo en EEUU y Europa está a punto de tocar récords históricos. Después de que las refinerías hayan trabajado a toda máquina los últimos meses, el petróleo refinado se acumula en los tanques", señaló Goldman Sachs en la nota para clientes.
"Esta situación revive los fantasmas de 1998 y 2009, cuando la capacidad de almacenamiento de petróleo refinado alcanzó máximos y envió el precio del crudo a precios muy bajos", sentencia el documento de la entidad estadounidense. En la crisis que vivió el oro negro en 2009, el precio del West Texas cayó por debajo de los 45 dólares. Por el contrario, en la de 1998 el barril se acercó mucho a los 15 dólares. Aunque también es cierto que el precio medio anual del barril en aquellos años era muy inferior al de ahora, por lo que comparar la situación puede llevar a error.

Ante esta situación, los expertos de Goldman Sachs no creen que el mercado logre alcanzar el equilibrio en 2016, como sí se había pronosticado en análisis anteriores a este último. La dudas sobre la demanda son mayores a medida que China va publicando indicadores económicos que muestran cierta debilidad.
Algunos expertos creen que China podría verse obligada a devaluar el yuan como ya hiciera a mediados de agosto. Esta situación siembre muchas dudas sobre el consumo de crudo futuro, ya que China es el segundo mayor consumidor de petróleo del mundo y un yuan más barato es sinónimo de petróleo (denominado en dólares) más caro para los ciudadanos de China.