El petróleo estadounidense (WTI) y el Brent de referencia en Europa suben hoy más de un 4% gracias a la fuerte demanda de Asia y el optimismo en torno al avance de las vacunas que están impulsando las perspectivas del consumo. Así, el crudo europeo consigue superar los 50 dólares por barril por primera vez desde marzo mientras el petróleo estadounidense ronda los 47,5 dólares.
Según Bloomberg, hay señales de una fuerte demanda en Asia a medida que las refinerías chinas suman esfuerzos para comprar crudo de lugares tan lejanos como el Mar del Norte. Indian Oil afirmó recientemente que el consumo de productos petroleros del país está casi de vuelta a la normalidad.
El crudo europeo subió a un máximo de nueve meses a medida que más países avanzan hacia un despliegue de la vacuna para el covid-19. La curva de futuros también ha cambiado, operando en una estructura conocida como backwardation, que hace que sea rentable ampliar contratos de un mes al otro. Esto también está atrayendo una avalancha de nuevos flujos al mercado.
"Ahora que ya hemos comenzado el despliegue de vacunas en alguna parte del mundo, hay optimismo sobre la normalización de la economía mundial y, por lo tanto, de unos precios del petróleo más altos", aseguro Bart Melek, jefe de estrategia global de materias primas de TD Securities.
Los planes de Irán para aumentar las ventas de crudo representan "uno de los mayores riesgos para el petróleo el próximo año si se materializa", dijo Commerzbank. Por otra parte, el aumento de los casos de coronavirus en todo el mundo ha hecho que los Gobiernos vuelvan a imponer restricciones más estrictas a la movilidad.
"El pulso de los mercados petroleros continúa en un tira y afloja sobre el aumento de los casos de virus en Estados Unidos y Europa y las posibles vacunas de covid-19", dijo Ehsan Khoman, de MUFG Bank.
La demanda no solo se recupera en Asia. También hay algunos puntos brillantes en Europa. El Reino Unido, que está reanudando la actividad tras salir de un segundo cierre este mes, registró un aumento de casi un 10% en las ventas de combustible para carretera la semana pasada. El uso de combustible en Brasil superó niveles previos al virus. No obstante, la perspectiva es más incierta en EEUU, donde el consumo de gasolina ha caído a un mínimo desde mayo.