
El barril de petróleo Texas y Brent cae más de un 4%, perdiendo la cota de los 39 dólares y 41 dólares, respectivamente. Los expertos achacan las caídas ante una perspectiva de que la recuperación de la demanda se trunque por la segunda ola de coronavirus.
"El sentimiento está sufriendo por las incertidumbres relacionadas con Covid-19", apunta Harry Tchilinguirian, jefe de estrategia de materias primas de BNP Paribas. El experto pone el acento sobre las dudas que hay en las futuras medidas para restringir la expansión de la segunda ola y si habrá capacidad para seguir apoyando a la economía global.
Los datos sobre infecciones son desoladores. Más de un millón de personas han muertos en todo el mundo, mientras los países europeos están endureciendo las restricciones de movilidad. En EEUU, Nueva York vuelve a mostrar el mayor ratio de contagio en tres meses.
Con este contexto es difícil que el consumo mundial de crudo siga repuntando en los próximos meses. Japón, el cuarto mayor comprador de crudo del mundo, ha publicado que las importaciones de petróleo del país en agosto cayeron más de un 25% respecto al año anterior.
El conflicto entre Armenia y Arzebaiyán todavía añade más presión al mercado energético. Arzebaiyán se ha convertido en un proveedor estratégico de petróleo y gas para los mercados europeos.
Tampoco ayudas las cifras de producción de Rusia. El bombeo ruso ha aumentado ligeramente en lo que va de septiembre, y es probable que el crudo supere las cuotas pactadas con la OPEP. El país produjo 37,942 millones de toneladas de petróleo en los primeros 28 días del mes, según datos del Ministerio de Energía.
Los datos de inventarios de Estados Unidos del miércoles brindarán una perspectiva actualizada sobre el consumo. Las reservas de crudo van creciendo semana a semana, según una encuesta de Bloomberg.