
Hacienda ya afronta devoluciones de más de 1.100 millones de euros al año por los litigios que ganan los contribuyentes en materia de impuestos y sanciones. Esta cifra se ha multiplicado por dos en tan solo cuestión de cuatro años. Según revela la Cuenta de la Administración General del Estado de 2023, el Ministerio que encabeza María Jesús Montero guardó una partida el año pasado de 1.112 millones de euros para hacer frente a estas reclamaciones de los contribuyentes, ya sean empresas o particulares.
La cuantía se ha ido incrementando de manera exponencial en los últimos años. La hucha del fisco para hacer devoluciones por reclamaciones administrativas y litigios era de 584 millones de euros en 2020; un año después, Hacienda incrementó la dotación hasta los 740 millones de euros. En 2022, la elevó hasta los 886 millones de euros, hasta alcanzar más de 1.100 millones el año pasado.
Además, hay que destacar que en estas cuantías no están incluidos golpes tan relevantes para el fisco como la anulación de normativas por parte del Tribunal Europeo de la Unión Europea (TJUE), del Constitucional o del Supremo, que también implican aparte relevantes importes en devoluciones.
La partida, solo incluye las reclamaciones por discrepancias en liquidaciones o multas con la Agencia Tributaria ante los tribunales económicos-administrativos o, ya por la vía legal, los contenciosos-administrativos.
Los tribunales económicos-administrativos son órganos integrados en el Ministerio de Hacienda que resuelven los conflictos de los contribuyentes contra el fisco. Cada CCAA tiene el suyo, aunque si el contribuyente está en desacuerdo con la resolución, puede elevar el caso al Tribunal Económico-Administrativo Central (TEAC). Asimismo, si éste resuelve en contra del contribuyente, que lo hace en el 51% de las ocasiones, éste puede acudir a los juzgados de lo Contencioso-Administrativo, encargados de solucionar los conflictos de particulares y empresas con la Administración.