Inversion a Fondo

EL PER CONDe: una ratio para acudir al mercado

Compañías con un 'CONDe' -crecimiento orgánico neto más dividendo estimados- ajustado al beneficio que se paga, con saldo positivo... son un reclamo a vigilar.

Cincuenta números de Inversión a Fondo, una publicación que en elEconomista hemos bautizado como el sitio de nuestro recreo para poder construir cultura financiera, suponen una cita excelente para presentar una ecuación sencilla, pero que a mí me resuelve una de las principales dudas cuando voy al mercado: si voy a comprar manzanas, y hay muchas manzanas sobre las que puedo elegir, cuál está más barata o más cara respecto al precio que voy a pagar.

Esta es la pregunta que le planteo a todo becario que llega a la sección de mercados de elEconomista desde hace una década. Se tiene que marchar en su primer día entendiendo qué es el PER (price to earnings ratio), o de forma más sencilla, el número de veces que el beneficio está recogido en el precio de la acción o los años en los que vas a tardar en recuperar el dinero que pones hoy al comprar un título por la vía del beneficio que genera la compañía. La retórica es esta última parrafada, la utilidad es que quien aprende esto sabe de un vistazo si Google está más cara o barata que Apple o Facebook. Una lectura simple, porque el concepto caro o barato cuando se compara un producto similar, pero no igual, es siempre algo relativo. Y no por pagar menos se compra siempre más barato. Mi abuela, que era una mujer muy humilde pero tremendamente sabia, decía que el dinero del pobre va dos veces al mercado, y para mí siempre me ha servido para explicarme muchas veces que un PER bajo no es ninguna garantía de comprar a buen precio.

La reflexión sobre Inditex, en Arteixo

Igual que un PER bajo no es la garantía de comprar barato, un PER alto en muchas ocasiones desecha excelentes ideas de inversión. Cada ocasión que acompaño a Elena, mi mujer, a Zara o Massimo Dutti me convenzo de que hay que tener siempre en cartera acciones de Inditex. Lo que ocurre es que estas acaban subiendo, se venden, y luego se te hace muy cuesta arriba recomprarlas porque tiendes a pensar que están muy caras al pagar un PER de 30 veces. Esto es lo que ha ocurrido casi en las dos últimas décadas, cuando lo caro en bolsa era Inditex, y lo barato Santander y Telefónica, pero la primera daba alegrías a sus accionistas y las otras dos... mejor no decir lo que pensamos. Lo que ocurre ahora es que el escenario ha cambiado. Esta afirmación tan contundente se la hacía a algunos responsables de Inditex en Arteixo el pasado mes, y como es lógico me preguntaron qué es lo que ha cambiado. En mi respuesta les expliqué una ratio del PER ajustada que yo utilizo, y que recoge las principales expectativas que debe marcarse un inversor para tomar la decisión para comprar.

El PER CONDE

Mi reflexión parte de la idea de que al dinero hay que ponerle un objetivo de rentabilidad. Por ese motivo busco las expectativas de crecimiento de una compañía para los dos próximos años. En el caso de Inditex, el consenso de mercado a mediados de este año para 2018 espera un 13,04 por ciento, y para 2019, un 12,03. Estamos hablando de una previsión de ganancias media del 12,53 por ciento. A esta expectativa de rentabilidad le sumo lo más tangible que me voy a encontrar, que son los dividendos -el beneficio es intangible porque lo reflejará el mercado como quiera hacerlo en la cotización-. ¡Y acepto que en la suma de ambos criterios hay una duplicación, porque el dividendo se nutre del beneficio! La retribución en el caso de Inditex son un 2,66 por ciento de media para los dos próximo años. Recopilando: 12,53 de expectativas de ganancia + 2,66 de dividendos = 15,19. A este resultado le resto el PER que estoy pagando si voy al mercado (28,74). Resultado del PER CONDe (Crecimiento orgánico neto más dividendo estimados) negativo. Algo histórico siempre en Inditex. El problema para la textil viene por la comparativa que ofrecen títulos como Santander o Telefónica cuando se les somete hoy a la ratio CONDe, porque ofrecen una ecuación positiva gracias a la sostenible mejora de los beneficios. Y son pocas las compañías en las que el saldo no está en rojo. En el caso de Santander, la mejora de beneficios media estimada para 2018/19 es del 11,96 por ciento. A lo que se suma una retribución prevista del 4,05. A este monto (16,01) se le resta el PER (12,47), lo que deja un saldo positivo de 3,54, algo superior al que arrojaría Telefónica (2,35). Estos saldos positivos no se producían hace años, y obliga a reflexionar si la tendencia entre los tres títulos de los últimos años puede cambiar. El PER CONDe es una ratio más, ni buena ni mala. Sirve para saber si las manzanas están más caras o baratas, y como me dijo Jesús Sánchez Quiñones, director general de Renta 4, debía publicarlo.

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