
El autor del tiroteo del domingo en Las Vegas, donde murieron 59 personas y más de 500 resultaron heridas, modificó 12 de sus armas para convertirlas en automáticas y estuvo disparando entre 9 y 11 minutos, según han revelado las autoridades.
En la última rueda de prensa sobre el tiroteo, el alguacil adjunto del condado de Las Vegas, Kevin McMahill, ha reconocido que las autoridades tienen todavía más preguntas que respuestas sobre los motivos que llevaron a Stephen Paddock, de 64 años, a cometer la matanza.
Según McMahill, Paddock estuvo disparando "entre 9 y 11 minutos" el domingo por la noche desde una habitación del hotel Mandalay Bay de Las Vegas contra los miles de asistentes a un festival de música country y después se quitó la vida.
Paddock modificó hasta 12 rifles semiautomáticos con dispositivos en las culatas para poder abrir fuego de manera completamente automática y disparar municiones contra la multitud a un ritmo más rápido. Así lo contó en esa rueda de prensa la agente Jill Snyder, de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos (ATF, por su sigla en inglés).
De acuerdo con Snyder, se han recuperado en total 47 armas de fuego en tres localizaciones diferentes, el hotel Mandalay Bay y dos residencias de Paddock, que fueron adquiridas en cuatro estados por el atacante. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sostuvo que desconoce si el autor del tiroteo tenía algún tipo de vínculo con el grupo yihadista Estado Islámico.
Así es Mesquite, donde vivía el tirador
El pequeño barrio residencial donde vivía Stephen Paddock, el autor de la masacre de Las Vegas, es tranquilo y apacible, aunque ahora perturbado por la sombra del mayor crimen con arma de fuego de su historia.
Se encuentra situado en medio del desierto de Nevada. Aquí, entre calibres 38, fusiles de asalto y balas, compró el arsenal con el que mataría a 59 personas. Sus motivos aún son un misterio. Su huella, por desgracia, imborrable.