
Las imágenes publicadas por el Diario de Pontevedra otorgan a Sergio Fariña a la categoría de héroe. Este pontevedrés es propietario de uno de los restaurantes cercanos al London Bridge, el puente donde se cometió parte del doble atentado contra la capital británica el sábado por la noche, y no dudó en refugiar a su establecimiento a varias personas tras desatarse el caos.
Su maniobra posiblemente salvó varias vidas el sábado por la noche. Fariña, al percatarse de que algo estaba ocurriendo algo en las inmediaciones de su local, en el Borough Market, hizo que toda la gente se metiera dentro del mismo y cerró las puertas.
Primero, ayudado por otros empleados, cerró la cristalera y metió las mesas de la terraza. Después se asomó y tras ver que los terroristas se acercaban accionó lo que parece ser una verja de seguridad, que no cerró a tiempo por lo que Fariña tuvo que aguantar la puerta por la que intentó entrar uno de los atacantes, que finalmente la dejó por imposible.
El doble ataque del sábado noche en el Puente de Londres y la zona de ocio de Borough Market se saldó con siete muertos y al menos 48 personas heridas. En este balance hay un español, Ignacio Echevarría, del que las autoridades aún no tienen constancia de haber sido identificado.