
La crisis del coronavirus está provocando escenas nunca vistas en EEUU. La última, hamburgueserías sin hamburguesas. La cadena Wendy's se ha visto obligada a retirar su producto principal de las cartas de numerosas zonas del país por falta de ternera procesada. La escasez se ha vivido en estados desde California hasta Kansas, y amenaza a uno de los principales negocios del país, la comida rápida, que había seguido funcionando sin restricciones.
Y la principal víctima han sido precisamente las cadenas, con Wendy's a la cabeza, que usan carne fresca, en vez de congelada como las dos más grandes del país, McDonald's y Buger King.
@Wendys is this the part where I say..."Where's the beef?"#toosoon pic.twitter.com/cQwUz7uPTR
— Amber Olivas (@amberlyno) May 4, 2020
beef shortages have begun. You can't buy burgers at the local Wendy's (via my brother) pic.twitter.com/H4urWSnwkb
— hk (@hassankhan) May 5, 2020
La escasez de carne viene de los enormes problemas que están teniendo las plantas procesadoras en las últimas semanas debido al virus. Por ejemplo, la falta de protecciones y pruebas hizo que una planta de Dakota del Norte acabara con más de 800 contagiados, lo que le obligó a parar. Y casos como este se están repitiendo por todo el país, en un sector de jornadas interminables y ninguna estabilidad laboral: los datos oficiales apuntan a 5.000 contagiados en este sector en 19 estados, con 20 fallecidos y numerosos cierres parciales o totales.
Esta crisis es especialmente dura en un país como EEUU, en el que la inmensa mayoría de la carne que se consume viene procesada y donde las carnicerías y el producto fresco están reservadas a las grandes ciudades y las clases medias. Y no solo son las hamburguesas: las alitas de pollo, los nuggets o los filetes de pavo, elementos básicos de la dieta estadounidense, son deshuesados, preparados y empaquetados en esas plantas gigantescas por toneladas al día. Es posible que mucha gente de zonas rurales que no se tomaba en serio la crisis del Covid-19 hasta ahora empiecen a preocuparse de verdad cuando se vean sin hamburguesas ni alitas.