
Ontier da un paso al frente en su nuevo plan de crecimiento estratégico con el alquiler de una nueva sede corporativa en Madrid.
El despacho ha firmado un contrato de arrendamiento a largo plazo con la socimi Árima para ocupar en su totalidad el edificio Habana, lo que supone que la firma casi dobla el espacio que tenía alquilado hasta ahora en Paseo de la Castellana 55, donde ha estado los últimos 15 años.
Esta mudanza es una clara declaración de intenciones por parte de Ontier, que pretende duplicar su tamaño en la próxima década. "Este edificio, que consideramos como un buque insignia de la arquitectura de Madrid, será para nosotros una herramienta de posicionamiento", asegura Pedro Rodero, socio director de Ontier, que destaca que el inmueble escenifica el cambio de paradigma que vive la compañía, ya que este destaca por estar "a la vanguardia tecnológica e inmobiliaria" y "está preparado para el crecimiento sostenible que va a experimentar Ontier".
El inmueble todavía se encuentra en proceso de obras, lo que para el CEO de Árima, Luis López de Herrera-Oria, "supone un primer paso en nuestra estrategia para integrar las especificaciones requeridas por nuestros clientes en nuestros inmuebles de manera que podemos crear espacios de trabajo totalmente adaptados a sus necesidades y así les ayudamos a retener talento".
Eficiencia y diseño
Habana está situado en la zona norte de Madrid en la confluencia del Paseo de la Habana y de la Avenida de Alfonso XIII. Este singular edificio de oficinas de Madrid, diseñado por el estudio de arquitectura Fenwick Iribarren, dispone de una superficie bruta alquilable total de 4.356 metros cuadrados, repartidos en cuatro plantas, a los que hay que añadir un jardín envolvente de 800 m2 y varias terrazas. El equipo de Árima ha contado con Marichal Forwarding, S.L. para la reforma integral del edificio y ha sido asesorado por Savills para la comercialización.
La sostenibilidad forma parte de la estrategia de Árima y está en el alma del diseño y contrucción de Habana que contará con las certificaciones Leed Gold, Well Gold y Well Health & Safety.
Habana dispone además de una zona propia de restauración, 20 salas privadas multiuso, 25 salas de reuniones, un auditorio con capacidad para 150 personas y de 65 plazas de parking -25% de ellas electrificadas-, al tiempo que está dotado con la última tecnología de control inteligente disponible en el mercado.
Además, según explica Guillermo Fernández-Cuesta, director Imobiliario de Árima, este "es el único edificio de oficinas en Madrid con fachada Krion de Porcelanosa, material activo que incrementa la salubridad y seguridad del espacio".
Por otro lado, el directivo asegura que "los sistemas de filtración, purificación y monitorización del aire integrados por la socimi en Habana incrementan la calidad del aire en el interior del edificio.
Según Fernández-Cuesta, la compañía prevé seguir replicando esta estrategia de comercialización en los próximos proyectos de reposicionamiento que tiene en marcha en estos momentos en la ciudad de Madrid, en concreto en el edificio Botánic, que dispondrá del único jardín botánico privado en España y aspira a ser uno de los espacios de oficinas más vanguardistas y sostenibles de Europa, y en el edificio Cadenza, llamado a convertirse en edificio Clase A con 14.500m2 alquilables y 196 plazas de aparcamiento.