La fusión entre Saba e Interparking no llegará para el mes de junio, tal y como se preveía inicialmente. La creación del mayor grupo de aparcamientos de Europa deberá esperar por lo menos hasta final de año. Esta es la previsión que se maneja en la cúpula de ambas organizaciones, que auguran que las autorizaciones necesarias para sellar la operación no llegarán hasta el último trimestre de 2025. Además, ya sopesan la probable necesidad de desinvertir algunos activos en Italia para obtener el visto bueno de Competencia.
Las fuentes consultadas por elEconomista.es explica que en el seno de la firma española y de la organización belga se trabaja a día de hoy con la previsión de que los permisos requeridos se obtendrán a final de este año frente a las esperanzas iniciales, más optimistas, de que llegarían en el primer semestre de esta campaña. Pactada en octubre de 2024, ambas empresas pasarán un año hasta que puedan ejecutar la fusión. Mientras esto no se produce, trabajan de manera independiente.
Uno de los filtros que Saba e Interparking deben superar es el de los reguladores de Competencia, pues las dos compañías coinciden en tres mercados: España, Italia y Alemania. Y en territorio transalpino es dónde admiten que se deberán realizar, con total seguridad, desinversiones.
La filial de CriteriaCaixa tenía 29.440 plazas de aparcamiento al cierre de 2023, algo menos de un tercio de las 106.877 que lucía el grupo centroeuropeo en la misma fecha. Ambos grupos coinciden en ciudades como Bari, Milán y Roma. Además de estos parkings libres habría que valorar las concesiones y contratos que también podrían llegar a ser objeto de desinversión si el regulador lo considerase necesario.
La huella complementaria de ambas marcas
Sin apenas dificultades aspiran a sacar adelante la unión de ambos negocios en los dos mercados que comparten. En España, Saba sumaba 73.878 plazas frente a las 30.594 de su homólogo, según los informes anuales de ambas firmas. Mientras, en Alemania la presencia de la firma con sede en Barcelona es residual (15.543 plazas de aparcamiento) frente a los 119.476 espacios que tiene Interparking.
Fuera de estos solapamientos, lo cierto es que la huella de Saba e Interparking es complementaria. El grupo español es particularmente fuerte en Reino Unido, con más de 130.000 plazas de aparcamiento, un mercado en el que la firma belga no está. La firma catalana también inyectará al conglomerado resultante más de 37.000 plazas en Portugal y una más modesta actividad en el este de Europa, con aparcamientos en República Checa y Eslovaquia.
La sociedad belga, por su parte, aportará su músculo en el centro de Europa, con 20.000 plazas en Polonia, 30.000 plazas en Francia, 47.000 plazas en Bélgica, 12.000 plazas en Austria y 60.000 plazas en Países Bajos.
Así, queda por ver qué sucederá con las 38.000 plazas de aparcamiento que tiene hoy Saba en Chile –con contratos como el Aeropuerto Internacional de Santiago de Chile- en un grupo tan europeo.
Saba + Interparking, nuevo líder europeo
A la espera de la actualización con los resultados de 2024, la suma de Interparking y Saba conformará el mayor grupo continental del sector de los aparcamientos. Entre ambas suman 2.000 aparcamientos en 16 países de Europa y América Latina con casi 800.000 plazas de estacionamiento y cerca de 8.000 puntos de recarga eléctrica. En 2023, la firma española logró unos ingresos de 308 millones y un ebitda de 143 millones de euros. Mientras, el grupo belga registró una cifra de negocio de 543 millones y un ebitda de 229 millones.
La fusión permitirá a Criteria cerrar una carpeta que lleva ya tres años sobre la mesa. Ya antes del coronavirus trató de desprenderse de la participada y en 2022 retomó sus intenciones. Interparking se posicionó a finales de ese mismo año como candidato, pero las negociaciones se estancaron por cuestiones regulatorias.
Sumar el 100% de una empresa carecía de sentido para el brazo inversor de la Fundació La Caixa; tanto con los planteamientos previos al aterrizaje del primer ejecutivo, Ángel Simón, como en la actualidad. Quedarse con el 18% sí encaja con el objetivo de ocupar posiciones destacadas, aunque minoritarias. El holding español cobrará parte de la transacción en efectivo y el resto en acciones de la compañía resultante.