Ibaizabal, uno de los principales grupos españoles dedicados a los servicios portuarios y navieros, desembarca en Portugal. El grupo vasco ha llegado a un acuerdo para adquirir la compañía lusa Portugs, firma con sociedades que prestan servicios de remolque y emergencia a buques en los puertos de Lisboa y Setúbal.
Con la adquisición, pendiente de las autorizaciones habituales en este tipo de transacciones, la empresa que preside y controla Alejandro Aznar Sainz, también accionista y presidente de Bodegas de los Herederos del Marqués de Riscal, da el salto al exterior y refuerza su actividad en el desarrollo de servicios portuarios.
Portugs está controlada por Pioneiro do Rio, que cuenta entre sus actividades con servicios de atraque y amarre para buques comerciales en los puertos de Lisboa y Sines
Portugs está controlada por Pioneiro do Rio, que cuenta entre sus actividades con servicios de atraque y amarre para buques comerciales en los puertos de Lisboa y Sines. Esta empresa acordó el pasado verano la adquisición de la participación que ostentaba Grupo Sousa. Entre las compañías que forman parte del perímetro de Portugs destaca Svitzer Portugal, la filial del gigante alemán Maersk que adquirió en 2019.
Ibaizabal instrumenta la compra a través del holding Grupo Financiero Ibaizabal. La firma, heredera de Naviera Aznar y con sede en Getxo (Vizcaya), es un proveedor de servicios integrados de gestión de buques para las industrias navieras internacionales y offshore. Ha estado vinculado al negocio marítimo desde 1860, focalizado en la operación y gestión de su propia flota de buques, principalmente, y de terceros.
Ibaizabal distribuye sus actividades en cuatro áreas principales: servicios portuarios, que se subdivide en operaciones de remolque y salvamento -tiene más de una veintena de remolcadores que operan en los puertos de Bilbao, A Coruña, Tarragona y Pasajes- y en amarre a puertos y terminales -Valencia y A Coruña-; Offshore, centrada en servicios de apoyo a las industrias de exploración y producción offshore de petróleo y gas; transporte marítimo (tankers y bunkers), que gestiona una flota de petroleros y buques cisterna que operan en todo el mundo; y astilleros, para la reparación y mantenimiento de navíos.
Esta última actividad la instrumenta a través de Valentia Maritime Group (VMG), fruto de la compra en 2020 de los activos del astillero valenciano Vulkan en el puerto de Sagunto.