La empresa Rockwell anuncia una inversión de cuatro millones de euros para implantarse en el Parque Científico Tecnológico del Transporte Santana, en Linares (Jaén). Esta compañía tecnológica e industrial desarrollará un proyecto innovador centrado en el desarrollo y fabricación de elementos estructurales de carbono aplicando tecnología de vanguardia a la producción de cuadros de bicicletas, componentes de drones, piezas de automoción o utillaje para golf.
"Para nosotros es una satisfacción, y desde que llegamos al Gobierno hace dos años nos propusimos traer empleo a la ciudad, poner el Parque de Santana a funcionar, poner a Linares de moda, y se está viendo cómo tras la implantación de unas empresas están llegando otras", ha dicho la alcaldesa linarense, Auxi Del Olmo.
Tras años de una profunda crisis industrial y social, Linares está resurgiendo como foco económico clave en el Norte de Andalucía, con la llegada de varias empresas automovilísticas chinas, otras del sector de Defensa, tecnológicas y de varios sectores.
Precisamente ha sido la regidora la que ha realizado el anuncio tras reunirse con el director general de la compañía, Luis Francisco Pérez Oliva, junto al socio fundador, Juan Piqueras Bravo, y otros representantes de la misma.
La alcaldesa ha indicado que esta empresa se va a instalar en una nave de 13.000 metros cuadrados que hay que rehabilitar, para lo cual contará con el apoyo del Ayuntamiento.
Tecnología
Fruto de un trabajo conjunto de I+D, Rockwell ha desarrollado un componente estructural de altísimo rendimiento que ya ha sido adoptado por una marca internacional de referencia por su ligereza, eficiencia y resistencia.
Según la alcaldesa, la empresa, en principio, va a crear alrededor de unos 40 ó 50 puestos de trabajo, y con una línea de crecimiento "potente e importante".
Rockwell realizará una inversión de unos cuatro millones de euros para todos los elementos productivos y destinados a equipamiento avanzado: hornos industriales, centros CNC, sistemas de climatización por zonas, control de emisiones y líneas de pintura especializadas.
La planta iniciará su producción con una capacidad estimada de 15.000 unidades anuales, con un crecimiento proyectado del 20 por ciento anual hasta alcanzar las 50.000 unidades. Este desarrollo industrial llevará aparejada la creación de empleo directo en el municipio: más de 40 puestos para operarios especializados y 10 puestos técnicos y de administración (I+D y gestión).
El crecimiento de la producción implicará también una ampliación progresiva del empleo en los próximos años, según se ha indicado desde el Ayuntamiento. Además de su enfoque inicial, Rockwell tiene como objetivo diversificar su gama de productos con aplicaciones en sectores como la automoción, la aeronáutica ligera, la movilidad eléctrica y el deporte profesional.