Con el incremento de la competencia en todos los sectores, los planes para implantar incentivos por parte de las empresas se ha convertido en un valor diferencial.
De esta forma, el 86% de las empresas españolas ya ha implantado sistemas de incentivos para sus empleados, según La Daurada, el mayor espacio de ocio y gastronomía de la costa de Barcelona que ofrece diversos programas de incentivos para empresas que buscan motivar a sus trabajadores y fomentar la unión de equipo.
La inversión por parte de las empresas en dichos incentivos se ve compensada al aumentar la productividad de los trabajadores. De hecho, los empleados que gozan de incentivos son un 31% más productivos, según un informe del Wall Street Journal junto al Opener Institute for People & Performance.
"Motivar a los empleados y cuidar de su estado de ánimo con respecto al trabajo es vital para la fidelización y retención de clientes, pero también para evitar la fuga de talento", explica Aina Álvarez, directora de Ventas y Eventos MICE de La Daurada.
Diseño de un plan
La directora propone a las empresas tres pasos para preparar un plan de incentivos. Primero, especificar los objetivos de la estrategia de incentivos, para potenciar aspectos específicos. El plan de incentivos debe potenciar el entorno, el clima laboral y los resultados de la empresa, entre otros. El segundo paso es identificar qué incentivo será óptimo para cada empleado. Conocer a los trabajadores para ofrecerles un incentivo determinado aumenta la implicación de los mismos.
Por último, hay que escoger un programa que cumpla los objetivos. Establecer actividades en las que los empleados se sientan incluidos y valorados, sin distinciones, es la mejor manera de conseguir el plan de incentivos.
