
El principal uso de las redes sociales por parte de los profesionales recae en vender -67%- seguido de la generación de branding y servicio de atención al cliente, según el último estudio anual sobre redes sociales 2018 de la asociación de publicidad, marketing y comunicación digital, IAB Spain.
Sin embargo, Inge Sáez, experta en estrategias y acciones en LinkedIn, cree que las redes sociales en general y LinkedIn en particular están desaprovechadas por parte de las empresas a la hora de comercializar sus productos o servicios. "Hace falta un cambio profundo, de mentalidad de los directivos y los empleados de la empresa, un aprendizaje por parte de los profesionales sobre "cómo LinkedIn y otras RRSS pueden ayudarnos a vender", y sobre todo una aceptación por parte de las empresas de que la manera de comprar de nuestros clientes ha cambiado, y por tanto, nuestra manera de vender debe cambiar", señala la experta.
Cómo afecta a las pymes
Para ello, Sáez afirma que las pymes pueden desarrollar dos estrategias para conseguir clientes gracias a LinkedIn, dos acercamientos diferentes a su público objetivo. "La primera sería una estrategia de atracción a través de la cual una pyme utiliza el perfil profesional de sus embajadores y el contenido como imán para atraer a su público ideal y la segunda es una estrategia de búsqueda y prospección, a través de la cual utilizamos el buscador de LinkedIn y el sistema de mensajería para conectar y desarrollar una relación con potenciales clientes que aún no nos conocen", señala la experta.
Además, para Sáez esta red social resulta una ventaja para las pequeñas empresas y es que: "Un perfil profesional es capaz de generar una relación mucho más auténtica que una página de empresa en LinkedIn. En LinkedIn todos somos iguales: un directivo de una gran multinacional tiene el mismo espacio que el dueño de una pequeña empresa".
Juan Domínguez, consejero delegado de la compañía de gestión de campañas publicitarias en redes sociales Adglow, afirma que respecto a la evolución de la publicidad en las redes sociales, "estas convierten y permiten llevar al usuario a realizar una acción muy concreta -comprar, registrarse, descargar o usar una aplicación, invitarle a un evento o físicamente a beneficiarse de una oferta en un establecimiento-, y claramente han desbordado la tarea de branding que tenían en sus orígenes".
Herramientas
En cuanto a las pymes y emprendedores que quieran darse a conocer a través de las redes sociales, Domínguez apuesta por olvidarse de los prejuicios y utilizar las posibilidades de prueba y error que ofrece cualquier plataforma. "Con unas inversiones de muy pocos miles de euros, se puede obtener una foto muy clara de en qué plataforma, con qué mensaje, qué imagen o qué línea de producto motiva a la audiencia".
Por otro lado, existen diferentes herramientas para controlar las relaciones entre empresas y clientes. Una de ellas, es el Customer Relationship Management (CRM). Según la agencia Datasocial, el CRM ayuda a organizar tres áreas clave en casi toda la compañía: la gestión comercial, el marketing y el servicio de atención al cliente. Por ello, subrayan tres de las ventajas que acompañan a esta solución:
- Más ventas: gracias a esta herramienta los comerciales pueden realizar un seguimiento de todas y cada una de sus potenciales ventas.
- Gestores más productivos: el CRM ayuda a tener organizada toda la información, por lo que los gestores pueden aprovechar el tiempo ahorrado en otras labores.
- Mejor comunicación: una falta de comunicación puede hacer que queden asuntos desatendidos. A través de esta herramienta, se puede conocer el estado del cliente y saber si hay alguna tarea pendiente.