El banco holandés ABN Amro, en manos del Estado neerlandés, duplicó en el primer trimestre de 2010 su beneficio neto, que alcanzó un valor de 178 millones de euros.
El banco especificó que, excluyendo costes de integración con el banco Fortis Holanda, el beneficio neto hubiese ascendido a 229 millones de euros.
Por su parte, Fortis Holanda obtuvo en el primer trimestre de 2010 un beneficio neto de 73 millones de euros, en comparación con la pérdida de 6 millones de euros registrada durante el mismo período del año anterior.