Evasión

La próxima vez que prepares gazpacho, agrega estos 2 ingredientes a la receta

Gazpacho. Foto: Canva.

El gazpacho es uno de los platos preferidos por muchos en los meses de verano: una sopa fría y refrescante que ayuda a combatir las altas temperaturas. Y es que en la época estival no es raro que haya menos apetito, por eso esta receta andaluz es perfecta para cualquiera.

A tener en cuenta

Es cierto que los ingredientes del gazpacho pueden repetir un poco a algunas personas, como el pimiento que no en todas sus variedades es el ingrediente más digestivo. Sin embargo, hay una gran cantidad de recetas para adaptarse a los gustos y necesidades de todos: sin pimiento, sin pepino, hasta hay gazpacho de fresas o sandía.

Pero si lo que quieres es darle un toque único a esta receta tienes que añadir dos ingredientes que lo cambiarán todo a la hora de preparar este plato.

El primero sería la pimienta negra. Esta especia es un activador natural muy sano, pero también aporta un toque muy interesante al plato tradicional. Hay que tener en cuenta que la pimienta da un nuevo matiz, pero nunca es protagonista. Ese ligero toque que consigue realzar el sabor de la receta tradicional es lo que se busca a la hora de conseguir un sabor más intenso sin cambiar por completo la estructura del plato.

Este otro puede parecer chocante, pero es mejor probarlo por uno mismo. Una manzana verde pelada, en su justa medida, puede equilibrar la acidez del tomate y el vinagre. Basta con media manzana y no más.

Paso a paso

Ingredientes:

  • Seis tomates muy maduros
  • Un pimiento rojo
  • Dos pimientos verdes
  • Un pepino
  • Una cebolla
  • 1/2 diente de ajo (dependerá de lo mucho que te guste, pero no te pases)
  • Dos rebanadas de pan de pueblo
  • Un litro de agua muy fría
  • Cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • Dos cucharadas de vinagre
  • Una pizca de sal
  • Una pizca de pimienta negra
  • Media manzana verde

Elaboración:

  1. Lo primero es lavar todas las verduras muy bien (la manzana también) y cortarlos en trozos que sean manejables para batir. Mientras tanto coloca el pan en otro cuenco y añade un poco de agua para que empape.
  2. Introduce todos los ingredientes en una batidora junto al pan un poco escurrido, el aceite de oliva, el vinagre, la sal y la pimienta. Tritúralo todo hasta que se consiga una mezcla bien integrada.
  3. Ve agregando el agua fría poco a poco hasta tener la textura buscada. Luego ajusta de sal, pimienta y vinagre. Refrigera por dos horas y sírvelo muy frío.
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