De ser un pueblo con menos de 100 habitantes a convertirse en el 'Osaka madrileño', el epicentro del arte japonés

La cultura oriental ha influido directamente en la sociedad europea, algo que se puede comprobar echando un rápido vistazo a las redes sociales. Desde productos culturales hasta su filosofía organizativa. Sin embargo, que un pequeño pueblo de la Sierra de Madrid se bautice como la Osaka madrileña puede resultar cuanto menos extraño.

Lo cierto es que el paisaje aquí no cuenta con imponentes rascacielos, no hay carteles de neón ni los cerezos en flor tan emblemáticos del país nipón. Hay muchas cosas por las que nadie pensaría en este pueblo como una de las ciudades más emblemáticas de Japón, pero en Puebla de la Sierra si que hay lazos con Osaka, su arte y su cultura. Aquí sus 99 habitantes conservan entre casas tradicionales de la sierra y robles centenarios el estudio de Federico Eguía, responsable de este proyecto que ha tenido repercusión internacional.

En un primer momento surgió la idea de unir el arte con la naturaleza, nada que ver con la cultura japonesa, pero sí con un conjunto de esculturas al aire libre. El Valle de los Sueños nació como un proyecto en 1998: "Como se trata de una iniciativa altruista, hemos ido desarrollándola poco a poco, a través de bienales en las que han participado artistas nacionales e internacionales. En la actualidad, contamos con 120 obras repartidas a lo largo del recorrido", comenta sobre el proyecto Eguía.

Poco a poco el lugar se llenó de obras realizadas por artistas nacionales e internacionales como Anne Cecile, Lucía Loren, Antonio Garza, Moisés Gil o Joaquín Manzano. La ideología de esta exposición se basa en que estas obras sean disfrutadas por los turistas de la manera que ellos consideren: tocándolas, pisándolas o sentándose en ellas. Este valle tan especial fue declarado en 2005 Reserva de la Biosfera por la Unesco, pero la historia no termina con una exposición en el exterior.

Este fue el inicio de un proyecto como sería años más tarde el museo de Pintura Contemporánea Japonesa. Fue en 2011 cuando Eguía, que tenía contactos con el país nipón, planteó la idea de hacer un intercambio cultural. De esta manera empezó su colaboración con la entidad Reijinsha, que, según su página web, sirve "como puente entre la sociedad y el mundo del arte y apoyar el desarrollo cultural del mundo".

Cada año ellos les donan obras y, aunque algunas no se puedan exponer debido al limitado espacio, ya cuentan con una colección de 165 obras. Además, cada dos años se organizan unas jornadas en las que se invita a los autores a que conozcan Puebla de la Sierra. Desde entonces este rincón de la Sierra de Madrid recibe muchos visitantes originarios de Japón.

Cómo llegar a Puebla de la Sierra

Toma la A-1 (Autovía del Norte) en dirección a Burgos. A la altura de La Cabrera, sal por la salida 60 y toma la carretera M-127 en dirección a El Berrueco y Robledillo de la Jara. Desde allí, continúa por la M-130, que atraviesa un hermoso paisaje de montaña, pasando por varios pueblos de la Sierra del Rincón. La carretera es estrecha y tiene curvas, pero ofrece unas vistas espectaculares del entorno natural. El trayecto completo dura aproximadamente una hora y media y recorre unos 100 kilómetros desde el centro de Madrid.

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