
Han pasado más de nueve años y miles de jóvenes siguen afectados por los préstamos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) que recibieron para poder cursar estudios de postgrado; estos afectados aún no pueden pagar porque la mayoría se encuentran todavía desempleados.
El Ministerio de Educación presupuestó para cuatro cursos escolares (2007/2011) 400 millones de euros, de los cuales concedió algo más de 220 millones a 15.623 alumnos. Actualmente, según el último Informe anual del ICO, los jóvenes han devuelto algo más de la mitad concedida, cerca de 105 millones. Pero la situación aún es muy comprometida porque hay miles de jóvenes que siguen endeudados. A principios de año, la plataforma de Afectados por el Préstamo Renta Universidad, que cuenta casi con 1.000 miembros, calculó que 12.160 ex estudiantes de másteres y doctorados (entre las cuatro convocatorias) continuaban endeudados con los bancos tras la medida que impulsó el Gobierno de Zapatero en 2007 y bajo el aval del ICO.
Las condiciones fueron endureciéndose gradualmente en sucesivas convocatorias hasta que este programa desapareció en 2011. Desde la convocatoria 2008-2009 en adelante, el comienzo de la amortización del préstamo se desligó de la renta futura, tras agotar los años de carencia (que se contemplaban en cada convocatoria) había que empezar a pagar se tuvieran ingresos o no. Desapareció la prescripción a los 15 años y ya no prescribía. Además, incluyeron intereses (como el 10 por ciento en concepto de demora), así como comisiones por reclamación de posiciones deudoras (30 euros para cada cantidad vencida y reclamada), han ido incrementando la deuda de cada cuota impagada, por lo que aquellos afectados que no hayan podido hacer frente al pago de las mismas (por no percibir ingresos de ningún tipo o percibir unos ingresos mínimos) han visto aumentada su deuda mes a mes.
Búsqueda de soluciones
Ante esta situación, el ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, prometió la semana pasada que buscará "una solución viable y justa" para los estudiantes que se enfrentan "a graves dificultades al tener que devolver un préstamo" universitario. El departamento de Universidad se reunirá "en breve" con los afectados.
Estos préstamos surgieron bajo el lema "estudiar más no cuesta tanto", en los que ofrecían un pago inicial para la matrícula del máster de hasta 6.000 euros por año (12.000 euros si el máster era de dos cursos), y una dieta mensual de hasta 800 euros al mes durante la vida del máster. El tipo de interés era nulo (0 por ciento), con lo que era dinero gratis pero que había que devolver. Una vez alcanzado un determinado nivel de renta, 22.000 euros brutos al año, se tenía que empezar a devolver. No era una beca, con lo que no se tenía que competir contra otros candidatos, sino que sencillamente lo solicitabas y, si cumplías los requisitos, lo concedían. Para devolverlo, había un plazo de 15 años, tras cinco de carencia. Si transcurridos 15 años no se había podido hacer frente a la amortización, la deuda prescribía.
El portavoz de Educación de Unidos Podemos, Javier Sánchez, destacó en el Congreso que miles de alumnos se vieron afectado por un cambio en las condiciones de sus becas universitarias. "En 2007, estas ayudas no tenían intereses y sólo debían devolverse a partir de una renta de 22.000 euros anuales". Unas condiciones que se eliminaron años después y que "convirtió a las becas en auténticos créditos bancarios".
Por su parte, la Asociación de Afectados por los Préstamos Renta Universidad (Afectados PRU) ha recibido "con satisfacción pero también con prudencia" el anuncio del ministro de rescatar a los estudiantes endeudados.
La entidad de exalumnos afectados ha pedido al ministro Pedro Duque que dada la situación, se puedan devolver los préstamos cuando éstos tengan "ingresos económicos suficientes" que fijan en 22.000 euros anuales, así como que "cesen las prácticas bancarias de cobro de intereses y comisiones", según ha detallado Llamas.
En mayo de este año, la asociación denunció un embargo judicial de 18.000 euros a una joven que pidió este préstamo y solicitó la nulidad del fallo porque consideraban "ilegal que un banco pueda embargar a una persona con base en un préstamo concedido con fondos públicos". Este fue el primer caso en el que una persona ha sido embargada por no poder devolver un préstamo renta universidad tras la demanda judicial de una entidad financiera.
Los créditos ahogan a los estudiantes en EEUU
La deuda educativa de EEUU se ha disparado de 840 millones de dólares en 2010 a más de 1,5 billones de dólares este año (1,27 billones de euros), según la Reserva Federal. Los préstamos para estudiantes son la segunda mayor fuente de deuda en EEUU, sólo superada por hipotecas. Además, el 80 por ciento de estos préstamos son federales y en paralelo, todo se fragua en un contexto de sueldos estancados y auge de desempleo. Siete de cada 10 estudiantes en EEUU solicitan algún tipo de ayuda financiera para completar su formación. El crecimiento de las matrículas universitarias, el mayor número de estudiantes cursando estudios y una mayor dependencia de los préstamos han hecho que el valor de la deuda casi se haya triplicado. Ahora asciende a más del 60 por ciento de la deuda total del país. Además, los préstamos a estudiantes constituyen el 45 por ciento de los activos financieros federales.