
La Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) urge al Gobierno a dar "pasos inmediatos" en la planificación de los residuos radiactivos -caducada desde 2010-, a "actualizar" su deficitaria financiación y a "garantizar" que el retraso en la construcción del Almacén Temporal Centralizado (ATC) -previsto para 2010- no afecte a la seguridad nuclear. Adicionalmente, pide "mejorar la coordinación" durante una emergencia.
Las anteriores son algunas de las 17 recomendaciones y 22 sugerencias que el organismo de la ONU encargado de supervisar la seguridad nuclear en todo el planeta le ha hecho a España después de una visita de dos semanas solicitada por el propio Gobierno para evaluar el marco regulatorio español sobre la seguridad nuclear y radiológica, así como la gestión del país de los residuos radiactivos.
La misión ha abarcado todas las instalaciones y actividades nucleares reguladas, así como el marco y programa para la gestión de los residuos radiactivos. Ha mantenido reuniones con el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), Enresa y el Ministerio para la Transición Ecológica, y observó inspecciones reglamentarias en una central nuclear, una instalación de fabricación de combustible nuclear y una gran instalación de radiografía industrial.
El informe señala los puntos negros de la regulación y la planificación de los residuos que ya se conocen
La OIEA ha resaltado "el fuerte compromiso" de España con la seguridad y ha detectado dos buenas prácticas que promoverá internacionalmente: una herramienta de gestión de datos del CSN para evaluar la seguridad del transporte de materiales radiactivos, y el diseño de Enresa para el ATC como parte de una estrategia nacional para administrar el combustible nuclear gastado.
Tanto el presidente del CSN, Fernando Marti, como el de Enresa, José Luis Navarro, se felicitaron por estas buenas prácticas y se mostraron "satisfechos" con la visita y sus conclusiones ante la prensa. La clave de esta visión positiva es que el informe del Organismo -al que ha tenido acceso elEconomista- señala los puntos negros de la regulación y la planificación de los residuos que ya se conocen -y sobre los que se está actuando- sin encontrar muchos más elementos adicionales.
Uno de ellos es la mala definición de la responsabilidad de comunicarse con la población en caso de emergencia: Greg Rzentkowski, director de la División de Seguridad de Instalaciones Nucleares de la OIEA, declaró que "debemos tener claro quién es responsable de informar a la población".
Por otro lado, el Consejo de Ministros aprobó el viernes un Real Decreto con requisitos adicionales a los europeos para la seguridad de las investigaciones y explotaciones de hidrocarburos en las aguas territoriales españolas que afectan a la concesión y transmisión de permisos y a los planes para situaciones de emergencia.