Iberdrola solicitó este miércoles a Red Eléctrica (REE) y al operador francés el envío de información "imprescindible" con la que poder completar su propio análisis y, así, poder responder a los requerimientos exigidos por los diferentes organismos nacionales e internacionales que investigan las causas del apagón del pasado 28 de abril.
Según confirmaron fuentes de la energética a la agencia Europa Press, para poder atender todos estos requerimientos, a Iberdrola le faltaría por recibir "información de los operadores de España y Francia que ha sido requerida y hasta el momento no ha sido recibida". Con esta información, la compañía se estaría refiriendo a "las actuaciones en líneas de transporte de 400 kV momentos antes del apagón".
Toda esta información aportada por fuentes de Iberdrola se publicó momentos después de que la propia Red Eléctrica emitiese un comunicado en el que pretendió puntualizar algunas de las informaciones publicadas por este diario a primera hora del miércoles, desgranando un informe publicado por la agrupación de operadores del sistema eléctrico, Entso-E.
Según estas, REE llevó a cabo una conexión de líneas internas en la zona cero del apagón justo antes del colapso del sistema, lo que pudo contribuir a empeorar la ya delicada situación que atravesaban en ese momento las redes, y generar una mayor sobretensión.
En concreto, entre las 12.16 y las 12.22 del día del cero energético se produjo el cambio en el sistema de operación de la interconexión con Francia para paliar las oscilaciones previas, mediante el cual pasó de un sistema de emulación de corriente continua a un modo de operación fijo. De este modo, el operador del sistema superó las primeras oscilaciones pero se quedó sin margen para nuevas actuaciones y sin el respaldo que el sistema europeo podía aportar por la falta de potencia síncrona para poder equilibrarlo en caso de necesidad.
De acuerdo con el comunicado del operador de red español, "No es cierto que el sistema español se quedase con esta acción sin el apoyo del sistema europeo", ya que adoptó una gestión contemplada en el protocolo entre ambos operadores.
Además, puntualiza que cuando se llevó a cabo el cierre de líneas, las tensiones en la red de 400 kV de la zona sur estaban entre 404 kV y 420 kV, siendo estos "valores absolutamente normales". "Pero es más, a las 12.32, un minuto antes del incidente, el rango de tensiones en la zona sur estaban entre 399 kV y 416 kV, valores que están dentro de los rangos de operación", añadió.