
En el año 2024, en España se registraron solicitudes de acceso y conexión de demanda energética por valor de 67.154 Megavatios (MW). De toda esta magnitud, se concedió únicamente una décima parte de la demandada (6.182 MW), mientras que otros 27.813 MW se encuentran actualmente en proceso de tramitación, pudiéndose conceder o rechazar. En contraparte, 33.159 MW, prácticamente la mitad (el 49%) de toda esta demanda fue denegada.
Por contextualizar estas cifras, la potencia actualmente contratada en España asciende a los 178.000 MW, por lo que en 2024 se registraron solicitudes equivalentes a casi un 40% (37%) del total del que se dispone actualmente.
Los datos, procedentes de la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (Aelec), en la que se encuentran socios como Endesa, Edp e Iberdrola, ponen de manifiesto el enorme potencial en inversiones que el país está desaprovechando en diversos sectores, como los Centros de Procesamiento de Datos (CPD), el almacenamiento, los planes urbanísticos o el sector industrial, el cual muestra de manera particular un notable "apetito" inversor.
Factores como el impulso a las energías renovables, la calidad del suministro energético o la posibilidad de encontrar un precio competitivo hacen, según Aelec, que España sea un destino muy atractivo para invertir en diferentes sectores. Sin embargo, todo ese embotellamiento a la hora de conceder las solicitudes de acceso y conexión, unido a los planes de descarbonización que están presentando otros vecinos europeos, podría provocar que una parte de la inversión huyese de España en busca de otros destinos.
Para la patronal energética, la razón principal por la que se están denegando tantas solicitudes se debe a una falta de capacidad de las redes de energía eléctrica. También, aunque en menor medida, al desistimiento de los propios promotores o a la falta de madurez de los proyectos.
De aprovechar este potencial, fuentes del sector aseguran que, en última instancia, beneficiaría a los consumidores, ya que aceptar toda esta demanda requeriría un mayor impulso a las renovables y, a su vez, abarataría el precio de la electricidad para el consumidor.
Oportunidad de inversión industrial
Pese a que el grueso de potencia demandada proviene delos CPD, desde Aelec ponen el foco en el sector industrial dada su capacidad para generar empleo cualificado y crecimiento sostenible. Según sus mismos datos, de los 18.618 MW demandados por el sector, únicamente se han concedido 1.938, mientras que la mayoría (10.715 MW) han sido denegados. Según sus cálculos, las solicitudes denegadas en 2024 podrían haber espantado más de 60.000 millones de euros de inversión industrial, por lo que fuentes de la asociación piden no desaprovechar esta "oportunidad" para el país.
Desde el sector energético son conscientes de que es imposible dar respuesta a todas las demandas por los motivos previamente mencionados. Sin embargo, sí consideran que se deberían agilizar los trámites e introducir algunas modificaciones para aprovechar todo este interés por la electrificación.
En primer lugar, Aelec solicita que, a la hora de tramitar las solicitudes, se ordenen y prioricen aquellos proyectos que sean lo suficientemente maduros e imprescindibles. En segundo lugar, la asociación considera fundamental introducir medidas regulatorias que favorezcan un mejor aprovechamiento de la red existente; ponen, como ejemplos, poder emplear las líneas de evacuación de los parques fotovoltaicos o de los nudos de transporte. También, creen que se podría permitir una mayor flexibilidad en la demanda, ya que no todos los consumidores demandan energía durante las mismas horas o días.
Por último, creen que sería útil establecer una tasa de retribución adecuada y garantizar un límite de inversión adecuado. Para ello, citan las cifras del estudio Grids por Speed, elaborado por EY, según el cual España debería acometer unas inversiones anuales de 4.300 millones en redes de distribución, frente a los 1.800 millones que se invierten actualmente.