
Iberdrola se lanza a crecer en Brasil. La compañía, a través de su filial Neoenergia, ha presentado una oferta para hacerse con el 6,89% del capital de Cosern, tal y como ha informado a la Comisión de Valores del país. De este modo, la eléctrica sigue reinvirtiendo el capital recibido de la venta de parte de su negocio en México.
La española pretende adquirir tanto las acciones ordinarias, como las preferentes de Clase A y Clase B. En la actualidad, Neoenergia ya posee aproximadamente el 93,11% del capital social de la distribuidora.
Este precio supone una inversión de 163 millones de reales brasileños -unos 30 millones de euros al cambio actual-. La oferta está destinada a la adquisición de la totalidad de las acciones en circulación, que ronda los 11,5 millones de acciones. La compañía pagará 13,73 reales brasileños por acción por las acciones ordinarias y 15,10 reales brasileños por las acciones preferentes de Clase A y B.
La operación, al igual que la anunciada en 2022 sobre la filial Neoenergia Pernambuco, contribuirá a simplificar la participación en las empresas distribuidoras de Neoenergia. Está previsto cerrar la operación a finales del ejercicio.
La oferta, que aún debe recibir las preceptivas autorizaciones regulatorias, está condicionada a que la acepten, al menos, dos tercios de los accionistas a los que se dirige la operación.
Iberdrola tiene que renovar en 2025 las concesiones de cuatro de sus cinco distribuidoras Neoenergia Coelba, Neoenergia Pernambuco, Neoenergia Cosern y Neoenergia Elektro y Naturgy las correspondientes a Ceg, Ceg Río y Naturgy SPS.
Neoenergia Cosern se creó en 1961 y estuvo bajo el control del Gobierno del Estado hasta 1997, cuando se llevó a cabo la privatización. Desde entonces, ha mantenido una evolución continua en la calidad del servicio ofrecido a los habitantes del estado de Rio Grande do Norte, buscando siempre mejorar la relación con sus clientes y contribuir al desarrollo del Estado. La compañía está presente en 167 municipios de Potiguares, tiene un área de concesión de 53.000 kilómetros cuadrados y atiende a 1,5 millones de clientes (3,5 millones de habitantes).
Iberdrola se encuentra también en medio de un proceso de compra del resto de las acciones de Avangrid. La eléctrica tiene previsto presentar el próximo 21 de marzo su plan de negocio y todas estas adquisiciones de participaciones minoritarias contribuirán a recuperar el nivel de negocio perdido tras la venta de los activos en México.