
Andalucía abre un nuevo frente de conflicto con el Gobierno central. Ahora con motivo del del trámite de audiencia e información pública de la propuesta de modificaciones puntuales del Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026, que según denuncia el Gobierno de Juanma Moreno deja fuera las actuaciones propuestas por la Junta para la consolidación de zonas industriales y mineras, la ejecución de grandes proyectos y para el despliegue de plantas renovables en Andalucía. El consejero Jorge Paradela, titular de Industria, Energía y Minas, anuncia alegaciones.
El cierre del anillo de Sevilla de 400 kilovoltios (kV) para satisfacer la demanda energética del Puerto de Sevilla, el adelanto del plazo de ejecución y una nueva posición de suministro para el desarrollo de proyectos mineros en la Faja Pirítica de Huelva, y el apoyo a la distribución en la subestación de Llerena para dar servicio a la zona del Guadiato y Valle de los Pedroches en el norte de la provincia de Córdoba son algunas de las actuaciones solicitadas por la Junta de Andalucía y no atendidas.
Tampoco están reflejados el adelanto del horizonte de ejecución a 2026 del segundo tramo del nuevo corredor Sevilla-Córdoba y su conexión con Castilla-La Mancha para la integración de renovables, y nuevas posiciones de evacuación de renovables (Puerto de la Cruz, Algeciras, Puebla de Guzmán, Iznalloz y Saleres) y de grandes consumos (Litoral, La Roda de Andalucía y Archidona).
Huelva y Algeciras, atendidas
Sí se incluyen ahora en el Plan actuaciones para atender grandes demandas en Huelva y Algeciras, vinculadas a la gran industria y a la producción de hidrógeno verde, con inversiones previstas de 6 millones de euros.
Del conjunto de modificaciones incluidas por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico sobre el plan inicial, 321 millones de euros para el conjunto del país, sólo esos 6 millones corresponderían a Andalucía, lo que apenas representa el 2% del total, cifra que queda muy alejada del peso poblacional de Andalucía (18%) y de su posición como segunda comunidad por extensión geográfica.
Andalucía gestiona además en torno al 20% de la potencia renovable en tramitación en España, con lo que sus necesidades de transporte de energía van a incrementarse de forma exponencial. Y la falta de infraestructuras adecuadas puede hacer decaer proyectos en trámite.
Discriminación
El actual Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026 fue aprobado por el Consejo de Ministros el 22 de marzo de 2022 y recoge actuaciones para Andalucía por valor de 515 millones, cifra muy inferior a los 782 millones que a juicio de la Junta le corresponden a la comunidad atendiendo a criterios objetivos como el peso poblacional, la superficie o el consumo eléctrico.
De esos 515 millones, 309 respondían a inversiones ya contempladas en la anterior planificación 2015-2020 pero que no se ejecutaron en plazo, y solo 206 millones eran nuevas infraestructuras. Sin embargo, de esa cifra de nuevas actuaciones, solo 96 millones, es decir, el 18% del total, coincidía con inversiones que habían sido solicitadas por Andalucía.
Y ello, insiste la Junta, a pesar de que Andalucía partía con desventaja respecto a otras comunidades autónomas, ya que la densidad de la red de transporte por habitante está un 42% por debajo de los valores medios peninsulares. En la comunidad andaluza se cuenta con 712 kilómetros de red por millón de habitantes frente a los 1.231 kilómetros de media, según datos a cierre de 2020.
Zonas deprimidas
El consejero Paradela ha insistido en la mala situación en la que se deja especialmente a parte de la provincia de Córdoba, Jaén y Almería en cuanto a infraestructuras eléctricas.
La administración andaluza argumenta que la red de transporte de electricidad es un activo imprescindible del que depende el desarrollo industrial y socioeconómico de la comunidad, además del suministro de un bien básico para el conjunto de la población como es la electricidad. En el momento actual, esa red es además necesaria para llevar a cabo una transición energética justa y equilibrada en Andalucía, además de una oportunidad para la mejor articulación de un extenso territorio y para alcanzar un equilibrio territorial que, a través de la dotación de este servicio básico, amplíe la posibilidad de desarrollo industrial a toda la geografía andaluza.
Impacto positivo
Hay ejemplos recientes del impacto económico de las infraestructuras eléctricas. En noviembre de 2022 Red Eléctrica, filial de Redeia responsable de la operación y el transporte del sistema eléctrico en España, puso en servicio el primer tramo del eje Caparacena-Baza-La Ribina, en la provincia de Granada y con influencia en toda Andalucía Oriental, con una inversión cercana a los 90 millones de euros.
Aún falta por desarrollar un segundo tramo hasta su destino final en la subestación de La Ribina (en el municipio de Antas, Almería) y en el que, en total, Red Eléctrica invertirá más de 162,6 millones de euros.
Se estima que el nuevo tendido podrá desatascar inversiones por valor de 3.000 millones de euros cuando esté completo y permitirá cuestiones tan elementales como la electrificación del eje ferroviario que llevará el AVE desde Murcia hasta la capital almeriense.