
Enagás GTS ha dado por finalizada este viernes la situación de operación excepcional declarada a mediados de octubre, cuando adoptó medidas como posponer determinadas descargas de gas natural licuado (GNL) dados los muy altos niveles de ocupación en los tanques de todas las plantas de regasificación. Se había producido cuellos de botellas para la descarga de GNL por el aluvión de importaciones procedente de EEUU, ante el miedo al corte de suministro total de gas ruso.
En una nota con fecha de 25 de noviembre, el gestor técnico del sistema gasista rechaza prolongar las decisiones aparejadas a esta operación excepcional nivel 0, e informa de que actualmente todas las operaciones firmes contratadas por los usuarios pueden ser llevadas a cabo en su fecha programada.
El pasado 17 de octubre Enagás GTS declaró esta situación tras registrar episodios de muy altos niveles de ocupación en los tanques de todas las plantas de regasificación del sistema que preveía que se mantuvieran, al menos, hasta la primera semana de noviembre. Esta situación había provocado que grandes metaneros quedaran a la deriva, frente a las costas españolas.
La tensión de la situación en toda Europa se vio reflejada en los precios del gas. El precio al contado llegó a cotizar en negativo. Los operadores llegaron a pagar para quitarse de encima contratos de gas.
Según explicaba entonces, desde el pasado agosto se ha venido experimentando una "importante reducción" de la demanda industrial respecto a lo inicialmente programado.
Adicionalmente, se ha dado un uso elevado de la inyección en almacenamientos subterráneos, que para aquellas alturas del año rondaban un nivel de llenado del 93%, por lo que estas infraestructuras "apenas están pudiendo aportar flexibilidad para absorber las desviaciones de la demanda" durante octubre.
Todo ello produjo un "desacoplamiento" entre los aprovisionamientos programados por los usuarios ese mes y el conjunto de demanda y exportaciones de gas natural y GNL, una situación que se ha repetido en otros países del entorno.
El miedo a tener problemas de suministro durante el invierno ante la amenaza de corte total de gas por parte de Rusia ha provocado que muchos países europeos importen y demanden gran cantidad de GNL para aumentar las reservas. Actualmente, las reservas de gas superan el 94% de su capacidad, lo que debería garantizar un invierno sin sobresaltos.
Medidas para garantizar la seguridad
El gestor técnico del sistema gasista acordó posponer las descargas para las que los usuarios no dispusieran de suficiente capacidad contratada en el Tanque Virtual de Balance (TVB).
También aquellas que, aún teniéndola, si se llevaran a cabo en la fecha programada podrían implicar alcanzar unos niveles en los tanques que excedieran el nivel máximo de GNL establecido para operar las infraestructuras de forma segura.
Asimismo, se decantó por denegar cualquier solicitud de flexibilidad que implicara un aumento de la cantidad de GNL a descargar, así como cambios en la fecha programada que llevasen a empeorar la situación.
Después de casi 40 días, estas medidas decaen ahora tras la comunicación de Enagás GTS.