
Más de una década después, en Villar de Cañas no hay almacén nuclear, y existe la posibilidad de que nunca lo haya. El Gobierno dio este martes la estocada definitiva al almacén nuclear de Villar de Cañas, el proyecto que pretendía albergar el combustible gastado de las centrales nucleares españolas hasta su almacenamiento en un lugar definitivo.
La última versión del Plan de Residuos Radiactivos (PGRR) que dio a conocer el Ministerio de Transición Ecológica (Miteco), liderado por Teresa Ribera, ha confirmado que el Ejecutivo prefiere en lugar del almacén único recomendado por expertos la construcción de siete almacenes temporales individualizados, es decir, uno por cada central. José María Saiz, alcalde de Villar de Cañas, está seguro de que en esta decisión ha influido mucho la oposición de la Junta de Castilla-La Mancha, presidida por Emiliano García-Page, quien ha estado desde que llegó al cargo en contra.
"Esto es una irresponsabilidad muy grande y estoy seguro de que es un capricho de García-Page. El ATC (Almacén Temporal Centralizado) en Villar de Cañas cuesta 1.000 millones de euros y se solucionaría el problema de los residuos nucleares durante 100 años, para generaciones venideras, mientras que lo que pretenden hacer vale más del doble", declara en una conversación telefónica con este medio.
Saiz teme que el proyecto no siga adelante después de la inversión millonaria que se ha llevado a cabo a lo largo de estos años con el objetivo de no solamente crecer económicamente, sino también en población. "Desde el primer momento hubo un consenso del cien por cien entre la gente del pueblo. Si no se hace, será una ruina para la provincia. La gente joven se va porque no encuentra ningún tipo de atractivo en estas zonas rurales y con esto sólo incentivan más el aumento de la despoblación. En cambio, si se hace, esto crecerá como la espuma porque habría trabajo de calidad. El que no lo vea es que está ciego", agrega.
El alcalde, además, no ve ningún tipo de complicación en la construcción de las instalaciones, "es un almacén de hormigón que se puede hacer perfectamente" y añade que "si esto no llega a buen puerto, que por el momento no se sabe al haberse presentado un borrador que deberá aprobarse, probablemente la Unión Europea tenga que intervenir y presionar".
"Este Ayuntamiento no ha recibido desde el Miteco ninguna respuesta a las alegaciones presentadas al séptimo Plan de Residuos Radioactivos, por lo que no podemos dar como válidas las excusas que maneja el Gobierno de España para comunicar que no va a construir el ATC de Villar de Cañas. Seguiremos luchando por albergar el ATC", concluye.
El Gobierno de Pedro Sánchez calcula que el coste total de gestionar los desechos nucleares y desmantelar las centrales ascenderá desde 1985 y hasta final de siglo a 26.560 millones de euros tras optar por la alternativa de los siete almacenes repartidos por España, según la nueva versión revisada del Plan de Residuos.