Energía

Javier Sancho (Repsol): "El hidrógeno verde transformará el polo petroquímico de Tarragona"

  • Planea invertir 1.400 millones de euros
Javier Sancho, director del complejo industrial de Repsol en Tarragona. EE

El complejo petroquímico de Repsol en Tarragona ha jugado un papel clave en la compañía desde su creación en los años 70, y lo prevé seguir haciendo en el futuro, con planes de inversión por 1.400 millones que incluyen, por ejemplo, el electrolizador más potente de España anunciado hasta la fecha para producir hidrógeno verde. Al frente de estas instalaciones está Javier Sancho desde septiembre de 2020. Cercano al territorio, ya que nació en Reus, en sus manos está gestionar la estrategia de reconversión del centro para adaptarse a las nuevas tendencias energéticas sin emisiones contaminantes.

El complejo de Tarragona ha recibido inversiones por casi 900 millones entre 2017 y 2022, y prevé más de 1.400 millones de euros, en el marco del Plan Estratégico 2021-2025 de la compañía y de los fondos Next Generation, sobre un total del grupo de 18.300 millones. ¿La coyuntura macroeconómica actual supondrá afectaciones en estos planes?

Estamos actualizando la planificación y puede ser hacia arriba. Estamos trabajando en acelerar la senda de transformación, con palancas de eficiencia energética, digitalización, electrificación, generación renovable, economía circular, hidrógeno renovable y captura de CO2. Repsol apuesta por sustituir el hidrógeno de origen fósil por electrolítico o de captura o de biogás.

A finales de septiembre, anunciaron que Repsol Tarragona acogerá el electrolizador más potente previsto hasta la fecha en España para producir hidrógeno verde y oxígeno, en alianza con Enagás Renovable, Iqoxe y Messer...

Será un electrolizador de 150 MW en su primera fase que abastecerá de hidrógeno renovable y oxígeno al Polo Petroquímico de Tarragona a partir de 2025 y que supondrá un hito en la transformación del complejo. Ubicado en el polígono norte, requerirá una inversión de unos 230 millones, más otros 80 si se añade almacenamiento eléctrico con baterías, y en una segunda fase, a partir de 2027, contempla alcanzar una potencia de 1GW.

Otro proyecto estrella para 2025 vinculado a la sostenibilidad y la economía circular, en este caso con Enerkem y Suez como aliados, es la Ecoplanta.

Fue el primero de los siete proyectos europeos elegidos por el Fondo de Innovación de la Comisión Europea para financiar iniciativas de gran escala. Permitirá convertir unas 390.000 toneladas anuales de residuos urbanos en materiales plásticos y combustibles avanzados. Producirá alrededor de 220.000 toneladas de metanol anualmente, contribuyendo a evitar la emisión de unas 200.000 toneladas de CO2 cada año y reduciendo los residuos que de otro modo acabarían en el vertedero. La inversión estimada es de cientos de millones, pero la cifra definitiva se concretará a finales de año.

Este año también se ha adjudicado a Tarragona una nueva planta para producir aislante para cables de alta tensión soterrados con una inversión de 35 millones, y la ampliación, por 18 millones, de la producción de polioles poliméricos de alta calidad para atender a los mercados del descanso, mobiliario y automoción.

El futuro pasa por diferenciarnos y entregar al mercado productos más especializados, para no tener que competir con productos comodities que pueden llegar de otros continentes con costes más bajos. Estas nuevas apuestas se suman a la de los propilenos de alta resistencia a los que destinamos 31 millones y que está en marcha desde 2021 para usos en auge como paquetería y baterías, entre otros.

¿Cómo afecta a Repsol Tarragona el marco fiscal catalán? Además de las exigencias ya vigentes, está en elaboración un nuevo impuesto sobre las actividades económicas que generan emisiones de gases de efecto invernadero...

Desde hace muchos años estamos realizando un gran esfuerzo por reducir las emisiones de CO2 y priorizamos la seguridad y el medio ambiente. Además, formamos parte del mercado de emisiones de CO2 y satisfacemos anualmente el importe del coste de las emisiones, que ha sufrido un incremento muy importante en los últimos años. Ha pasado de una media de alrededor de cinco euros por tonelada a 100 euros por tonelada hace unas semanas. Es un coste muy elevado y que incentiva a las empresas a realizar inversiones de reducciones de CO2. Además, la UE está trabajando en la revisión de la normativa comunitaria para hacerla más exigente, ampliando el alcance de las empresas sometidas, y no es oportuno añadir cargas. El nuevo impuesto catalán no existe todavía con un formato final, por lo que no sabemos cómo va a ser, pero si fuera muy lesivo para las empresas que ya estamos dentro del mercado de CO2 europeo, es un riesgo a la pérdida de competitividad de la industria catalana y de toda la economía catalana, y también podría suponer una doble imposición. En cualquier caso, un impuesto que solo afecte a las instalaciones ubicadas en Cataluña, cuando las emisiones de CO2 no tienen fronteras, persigue unos objetivos medioambientales que no se conseguirían. Solo conseguirá incrementar el riesgo de huida de proyectos.

¿Cómo será el complejo de Repsol en Tarragona en 2050?

En 2050, Tarragona será un complejo con cero emisiones, que habremos transformado en un hub multienergético, en el que las materias primas que utilizaremos provendrán de fuentes diversas: vegetales, residuos urbanos, biomasa, plásticos reciclados….y los productos que fabricaremos tendrán la misma utilidad que los que producimos ahora, pero con un ADN absolutamente distinto.

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