
El ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, ha planteado al presidente de Renault, Jean-Dominique Senard, cuatro garantías para seguir adelante con las negociaciones de una fusión al 50% con Fiat Chrysler (FCA), entre ellas que el acuerdo se mantenga dentro de la alianza con Nissan. Además, pide que no se toque ninguna fábrica en el país.
"Quiero que este acuerdo se haga en el marco de la alianza", ha dicho Le Maire a la emisora RTL subrayando que la colaboración con Japón ha permitido grandes inversiones tecnológicas. Renault mantiene una triple alianza con Nissan y Mitsubishi, pero el escándalo de corrupción con Carlos Ghosn ha provocado en los últimos meses un enfriamiento de las relaciones.
El ministro de Economía ha recordado que la semana pasada se reunió en París con su homólogo japonés, Hiroshige Seko, con el objetivo de reforzar la unión entre los grupos. Fue él mismo, dijo, quien informó el pasado viernes a Japón de la propuesta de FCA, tras recibir la información por parte de Renault.
"La dirección de Renault debate desde hace meses con la de Fiat. Después hubo un anuncio oficial, que se hizo el viernes, con una propuesta que me presentó el presidente de Renault el viernes. Fue en ese momento cuando avisé a los japoneses", ha explicado.
La reacción de los nipones fue "abierta", pero Le Maire espera que sea fructífero el viaje de Senard a Japón, donde se encuentra este martes: "Creo más en el contacto directo que en el telefónico", ha dicho.
El Gobierno galo vigila que no se produzca cierre de fábricas ni pérdida de empleos
Otra de las condiciones impuestas por Le Maire es que la fusión no suponga el cierre de ninguna de las fábricas de Francia, el mantenimiento total de los empleos en su territorio, así como ciertas garantías sobre la representación de la dirección "para que los intereses de Francia estén bien representados".
La cuarta y última es que este nuevo grupo creado por la fusión de ambas firmas participe en la creación de baterías eléctricas europeas, lo que en palabras de Le Maire podría crear miles de empleos en el continente, con el objetivo también de que estas máquinas vengan de Europa y no de China o Corea del Sur. "Permaneceré muy atento a estas garantías", ha dicho.
La compañía francesa anunció el lunes que su Consejo de Administración estudia "con interés" la propuesta de fusión con Fiat Chrysler, que los convertiría en el tercer grupo mundial por volumen de ventas y que ha generado dudas sobre su asociación con las niponas.
Según FCA, la unión de ambas compañías supondría la creación de un grupo automovilístico líder en ingresos, volúmenes, rentabilidad y tecnología, con unas ventas totales de 8,7 millones de vehículos al año. Según Bloomberg, de salir adelante la operación daría lugar al tercer fabricante del mundo por número de vehículo por detrás de Volkswagen y Toyota.
Con Nissan y Mitsubishi se integraran en el futuro grupo, la compañía resultante alcanzaría una cifra de fabricación de 15 millones de vehículos al año por delante de los 10 millones de Volkswagen y Toyota.
El presidente de Francia llegó este martes a Japón para una reunión periódica sobre la Alianza con Nissan y Mitsubishi y para opinar sobre lo que considera mejor para ella. "Debatiré sobre lo que es bueno para Renault y Nissan", ha declarado escuetamente Senard a los periodistas poco después de aterrizar en el aeropuerto de Tokio.