
La Junta General de accionistas de EDP ha tumbado la opa que su principal accionista, la estatal China Three Gorges (CTG), le lanzó hace casi un año.
A petición del fondo norteamericano Elliot, los accionistas tenían que decidir hoy sobre la supresión del actual límite al ejercicio de los derechos políticos, situado en el 25% de los votos, con independencia de la participación económica.
La eliminación de este blindaje es uno de los requisitos para el éxito de la opa lanzada por CGT, de 3,26 euros por título. Obviamente, no quería hacerse con la mayoría del capital sin tener pleno poder de decisión.
Y los accionistas de EDP han votado a favor de retirar el vigente blindaje estatutario, pero sólo el 56,6% de los que estaban presentes en la Junta, representando el 65,18% del capital, cuando se necesitaban los dos tercios de los votos para ser aprobado.
La opa se declarará extinta
El Regulador del mercado bursátil luso, la CMVM, había anunciado hace unas semanas de que en el caso de que los accionistas de EDP rechazasen eliminar la limitación al derecho de voto, tendría que considerar "extinta" la opa, a menos de que CGT admitiese suprimir esa condición para lanzar su oferta.
CTG, que cuenta con el 23,27% de EDP, remitió a su vez la semana pasada una carta a EDP en la que informaba de sus actos en el caso de que se rechazase la eliminación del blindaje. Apuntó que, de un modo "irrevocable", todas las condiciones de su opa se mantendrían vigentes.
La firma pública china añadió que acataría la decisión que adoptasen los accionistas "como constantemente ha hecho en el pasado", que se mantendrá como un inversor estratégico de largo plazo y que continuará contribuyendo como un socio estratégico al desarrollo sostenible de la compañía, con independencia del resultado de la opa.