La vacuna de la meningitis B vuelve a representar la falta de equidad en la sanidad española. Los Gobiernos de Canarias y Castilla y León han decidido sufragar a sus ciudadanos los más de 400 euros que cuestan en muchos casos las dosis necesarias de Bexsero, la vacuna frente a la meningitis B recomendada por los pediatras para todos los niños a partir de los dos meses de edad. Esta vacuna, comercializada por el laboratorio GlaxoSmithKline (GSK), no está financiada por el Ministerio de Sanidad y por tanto no está incluida en el calendario de vacunación.
El precio del producto en nuestro país es de 106,15 euros por dosis, por lo que las cuatro dosis necesarias para un bebé de hasta cinco meses alcanza los 318 euros. La propuesta de las dos regiones también incluye financiar la vacuna conjugada tetravalente frente al meningococo ACWY (Nimenrix de Pfizer y Menveo de GSK) y la vacuna del VPH (Gardasil 9, de MSD). Tanto Canarias como Castilla y León han reservado ya unos 3 millones de euros para afrontar este gasto en vacunación.
Al enterarse de la decisión, el Ministerio de Sanidad ha criticado con dureza a ambos Ejecutivos. "Se trata de una decisión estrictamente política" llegó a decir la ministra Luisa Carcedo. "Primero hay que tener en cuenta el impacto epidemiológico que tiene la incorporación de las vacunas", añadió Carcedo. "Un éxito de país es haber logrado un calendario único de vacunaciones a lo largo de la vida" por lo que cualquier modificación del mismo, según advirtió la ministra "requiere al menos una consideración, un análisis del pacto epidemiológico". La ministra insistió en que, "por respeto institucional", las regiones deberían haber planteado esta cuestión "en el seno de la Comisión de Vacunas del Sistema Nacional de Salud".
"La inclusión de esta vacuna busca también garantizar la equidad en el acceso a las vacunas para evitar desigualdades".
Mientras, el Gobierno canario aduce razones económicas de su población para justificar su medida. "La inclusión de esta vacuna busca también garantizar la equidad en el acceso a las vacunas para evitar desigualdades".
Y es que según fuentes de este Ejecutivo regional, la carencia de un acceso equivalente a la vacuna afectaba de manera negativa a los sectores más empobrecidos de la sociedad que son, justamente, los que tienen más riesgo de contraer la enfermedad.
"Aunque haya pocos casos de la enfermedad -en Canarias se han registrado dos en lo que va de año-, su evolución es imprevisible y se trata de una patología grave con una mortalidad aproximada del 10% y un riesgo de secuelas permanentes del entre el 20 y el 30% entre los supervivientes", afirman desde el gobierno de Fernando Clavijo.
Por su parte, desde Castilla y León, el director de Salud Pública, Agustín Álvarez, señala que su comunidad puede introducir la vacuna el 15 de marzo, ya que cuenta "con la logística y con el presupuesto". El próximo 4 de marzo, el Ministerio de Sanidad ha convocado a todas las Consejerías de Sanidad de las comunidades autónomas para celebrar el Consejo Interterritorial de Salud, donde seguro se pondrá sobre la mesa esta financiación.
Apoyo de los pediatras
La Asociación Española de Pediatría (AEP) ha celebrado que estas dos comunidades se hayan sumado a sus recomendaciones de vacunación. Los pediatras esperan que "otras comunidades autónomas españolas consideren dar este mismo paso en los próximos meses", aunque también aseguran entender "la dificultad de unificar los calendarios" y comprenden que las comunidades autónomas "se vayan sumando a las recomendaciones de la AEP, según sus sensibilidades y disponibilidad de recursos".
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