
Iberdrola ha superado los 3.000 millones de beneficio. La eléctrica ha conseguido, por primera vez, 3.014 millones, lo que supone un crecimiento del 7,5%. El resultado ha sido impulsado por las inversiones de cerca de 20.000 millones que ha realizado la compañía en los últimos cuatro años (5.320 millones este pasado ejercicio) para seguir expandiendo sus negocios.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) del grupo se sitúa en 9.349 millones de euros, un 27,7% más que en el ejercicio anterior, gracias al buen comportamiento de todos los negocios, cuyos resultados crecen a doble dígito. El 78% de este importe procede de áreas reguladas o con contratos a largo plazo, en línea con el enfoque estratégico del grupo.
El flujo de caja aumenta un 13,1% hasta los 7.328 millones de euros, mejorando el ratio entre caja operativa y deuda neta hasta el 21,5%.
Aumento del dividendo
La eléctrica ha comunicado que propondrá a la Junta un aumento del dividendo del 7,7% con cargo a 2018, hasta los 0,351 euros por título. En enero ha efectuado un primer pago a cuenta de 0,15 euros por título. Reeditará su programa de Retribución Flexible para que los accionistas elijan percibir el pago en metálico o en acciones, y evitará la dilución con una amortización.Tras incorporar a más de 1.600 profesionales en el ejercicio, la plantilla de Iberdrola supera las 34.000 personas -el 99% con contratos indefinidos- y genera un total de 425.000 puestos de trabajo.
Las compras del grupo, excluyendo los aprovisionamientos energéticos, alcanzan los 8.000 millones de euros a miles de suministradores en 2018, siendo un 85% empresas locales.
Las emisiones específicas de CO2 en España descienden hasta los 82 gr CO2/kWh frente a los 302 gr CO2 / kWh del sector europeo.
La compañía, que ha incorporado a su estrategia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas para 2030, se convierte en la empresa del Ibex 35 con un mayor porcentaje de mujeres en su Consejo de Administración (42,8%).