
El Corte Inglés sigue con su plan de desinversiones para reducir deuda y sanear su balance desprendiéndose del ladrillo. La compañía ha encargado a PwC desprenderse de un total de 130 activos por entre 1.500 millones y 2.000 millones de euros. En este sentido, negocia ya la venta de dos edificios de su sede ubicados en la calle Hermosilla de Madrid, según han confirmado distintas fuentes del sector a elEconomista. Concretamente, se trata de los números 127-129, donde trabaja el equipo de Compras y se encuentran frente al inmueble de la sede corporativa, en el 112. Estas desinversiones se llevan a cabo tras fracasar la venta de la filial Informática El Corte Inglés y tras año y medio sin encontrar comprador por los hoteles Ayre.
En conjunto, se está analizando la venta de terrenos, oficinas, superficies comerciales y plataformas logísticas, con el objetivo de reducir la deuda de la empresa, que se eleva a 3.650 millones de euros. El Corte Inglés cuenta, en conjunto, con un patrimonio inmobiliario valorado en más de 17.000 millones de euros e insiste en que los activos que se venderán ahora en ningún caso son estratégicos.
De momento, la compañía está negociando ya la venta de dos edificios en la calle Hermosilla con distintos interesados. La operación está todavía está en una fase inicial y podría rondar los 120 millones de euros. Así, las mismas fuentes aseguran que El Corte Inglés está pidiendo unos 5.000 euros por metro cuadrado, a los que tras la compra el nuevo propietario tendría que sumarle otros 1.500 euros para llevar a cabo una reforma que reposicionara el inmueble, ya que se trata de dos activos algo obsoletos.
Igualmente, los expertos apuntan a que los interesados podrían estar pensando en dar un cambio de uso al residencial, ya que la zona de los edificios, en pleno Barrio de Salamanca, no está especialmente dedicada a oficinas, y un uso de vivienda podría ofrecerles una mayor rentabilidad en la operación.
Coincidiendo con las negociaciones, El Corte Inglés, que hasta ahora casi todo lo que ha desinvertido lo ha hecho mediante el modelo de sale & leaseback (venta con contrato de alquiler), se planteó trasladar su departamento de Compras a otro de sus inmuebles en la calle Tomás Bretón, en el Barrio de las Delicias.
Esto encajaría con las peticiones de ciertos inversores, que prefieren quedarse con el inmueble vacío para crear valor con una reforma. Sin embargo, fuentes de la compañía aseguran a este periódico que "no hay nada decidido" al respecto de esa mudanza, que supondría el cambio de un millar de empleados.
Negociaciones con Merlín
La venta de estos dos inmuebles se suma a otra batería de operaciones inmobiliarias que tiene en marcha el gigante de la distribución, entre la que destaca la desinversión de su portfolio logístico.
En este terreno El Corté Inglés estuvo en negociaciones con Merlin, tal y como lo confirmó la socimi a través de un hecho relevante. "Se han mantenido conversaciones muy preliminares sobre ciertos activos logísticos u operaciones conjuntas en el ámbito logístico, sin que se haya alcanzado acuerdo alguno".
El Corte Inglés cuenta con una red de almacenes y plataformas logísticas que suman una superficie construida en total de más de 1,4 millones de metros cuadrados. Todos esos activos forman parte del paquete global del que el grupo se va a desprender ahora.
En el ámbito corporativo, la compañía que preside Jesús Nuño de la Rosa ha frenado, al menos por el momento, la venta de Informática El Corte Inglés (Iecisa). El grupo había llegado después del pasado verano a un principio de acuerdo con la tecnológica mexicana Kio Networks, por el que iba a vender esta filial por un importe cercano a los 350 millones, en el marco también del plan de reducción de deuda.
Luz verde a otro proyecto
Este jueves, El Corte Inglés recibió luz verde por parte del pleno del Ayuntamiento de Madrid para su proyecto de levantar un nuevo centro en Paseo de la Castellana 69 sobre los terrenos que compró a Adif en 2014 por 136 millones de euros.
Este nuevo complejo, ubicado en la zona de Azca, se encuentra al lado de su buque insignia en la Capital, el centro de Nuevos Ministerios, que cuenta con una superficie comercial y de servicios de 130.000 metros cuadrados. Cuando la compañía adquirió los terrenos estos tenían asignados una edificabilidad lucrativa de 10.176 m2 sobre rasante de uso terciario y 25.016 m2 bajo rasante.