El 38% de los españoles que ahorra ha decidido tener su dinero en casa, "debajo del colchón". Esta es una de las conclusiones -literales- a las que ha llegado el Banco de España y la CNMV tras haber levado a cabo una encuesta para conocer los hábitos y la previsión económica de los ciudadanos a través de sus inversiones.
Según destacan ambos organismos este porcentaje de personas que se mantiene al margen del sector financiero en los últimos doce meses no es "nada desdeñable". La encuesta, que ha sido recientemente publicada aunque realizada a finales de 2016 y principios de 2017, no ofrece las causas, pero sí destaca que este modo de ahorro en metálico se observa prácticamente en todos los grupos de edad, alcanzando el 53% entre el colectivo de desempleados.
El origen de guardar el dinero en el colchón puede ser múltiple: desde una costumbre hasta el temor a perderlo, así como que los fondos se hayan conseguido de manera irregular. También puede influir que la banca, en la actualidad, apenas ofrece rentabilidades por los depósitos tradicionales debido a que el euribor a caído al terreno negativo. La media de intereses que paga por las imposiciones a plazo ha descendido hasta el 0,07%.
El documento de ambos reguladores refleja que la población con menor edad es la que más ahorra, pero también la que evita a las entidades al tener el dinero contante y sonante en sus hogares. El 77% de los españoles entre 18 y 34 años reserva fondos, frente a una media del 61%, y el medio predilecto para hacerlo es en efectivo. Sólo el 11% tiene una cuenta de ahorro y únicamente el 2% realiza aportaciones a un plan de pensiones, a un fondo de inversión o ha comprado acciones en bolsa.
Por contra, el 45% de las personas de más edad, de entre 65 y 79 años, acumula recursos para gastos futuros y el 26% de ellos lo mete en el colchón.
La encuesta pone de relieve que la práctica de guardar el dinero en el colchón está extendida por toda la geografía, aunque está más implantada en Andalucía e Islas Baleares, donde el 50% de las personas que ahorran los hacen en metálico. Este porcentaje desciende a menos del 30% en el caso de los aragones, navarros, riojanos y catalanes.
La encuesta también refleja que un 28% de los españoles vive en hogares con desahorro (es decir, en familias cuyos gastos han excedido a sus ingresos en los últimos doce meses), porcentaje que se incrementa entre los individuos con bajo nivel educativo (un 35%) y entre quienes viven con rentas inferiores a 14.500 euros.