
El consejero delegado de Atlantia, Giovanni Castellucci, está preparando el aumento de la oferta por Abertis. Para ello, el ejecutivo de la italiana ha viajado a Estados Unidos, donde está manteniendo contactos con las entidades financieras para poder cerrar la financiación de este aumento y explicar a los inversores las bondades de su opa.
La mejora de la oferta sobre la concesionaria catalana no se producirá antes de la aprobación por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores de la oferta presentada por la filial alemana de ACS, Hochtief. De este modo, la guerra de ofertas que se puede abrir entre la empresa italiana, propiedad de la familia Benetton, y la compañía del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, acabará beneficiando a los accionistas de la española.
Por el momento, el consejo de Abertis ha considerado que el plan industrial de Atlantia les resultaba más atractivo, pero exigían una mejora de la oferta económica, que Atlantia está preparando y que se espera sustanciosa para tratar de desbancar a Hochtief.
ACS busca un socio
ACS, por su parte, sigue buscando un socio para poder afrontar una guerra de ofertas en mejores condiciones y sin verse forzado a mayores desinversiones.
Por el camino, Abertis tiene también la puerta abierta a un venta de una parte de Cellnex a Criteria, con la intención de satisfacer otra de las demandas del Gobierno: garantizar las inversiones en España.
Los ministerios de Energía y de Fomento mantienen una discusión con la CNMV sobre la necesidad de Atlantia y Hochtief de pedir permiso para hacerse con Abertis, por su control de Hispasat y de las concesiones de autopistas.
El informe, que se esperaba para finales de octubre, sigue sin conocerse, pero se vilsumbran ya soluciones alternativas. El ministro de Energía, Álvaro Nadal, anunció recientemente en el Ágora de elEconomista que está preparando junto con Red Eléctrica una normativa que le permita desbloquear la compra de Hispasat, en una operación valorada en 1.000 millones de euros. El ministro mostró la intención del Gobierno de "elaborar una muralla china financiera", de tal forma que el negocio regulado nunca se pueda ver afectado por la actividad del operador de satélites, lo que permitiría a su vez eliminar la necesidad de este permiso.
La operación, además, requerirá el visto bueno de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), si esta función no se transfiere antes al Ministerio en una medida que puede ser llevada al Supremo por parte del regulador.
Folgado explicó en aquel mismo acto que Red Eléctrica trabajaba en este documento, que debe ser analizado por su Consejo de Administración, porque "la separación de negocios es algo que tenemos claro" y explicó que el nivel de deuda de la empresa no será ningún problema, puesto que cuenta con la capacidad suficiente para poder asumir esta inversión sin que se resienta el rating de la compañía.
El ministro de Energía quiso desligar esta operación de la oferta de Atlantia y Hochtief por Abertis, pero una vez cerrada Energía ya no podría exigir ningun permiso a la italiana.