
Los trabajadores de mantenimiento y seguridad del Banco de Inglaterra han iniciado una huelga de cuatro días para demandar una mayor subida salarial. Estos paros son los primeros en los últimos 50 años de la institución.
Este paso se produce después de que el organismo limitase una subida salarial de la plantilla al 1%, un porcentaje por debajo de la inflación, que el pasado mes de mayo alcanzó el 2,9%, su nivel más alto en cuatro años.
Así las cosas, el sindicato de los trabajadores reclama que el Banco de Inglaterra regrese a la mesa de negociaciones para discutir el pago de un sueldo justo y advierte de que si no se zanja esta disputa salarial consultará a sus afiliados en otros departamentos de la institución como parte de un plan para escalar la dimensión de la protesta.