
El grupo siderúrgico Acerinox obtuvo el año pasado un beneficio neto de 80,3 millones, un 87,3% más que en 2015, ejercicio en el que ganó 43 millones, ha comunicado hoy la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El beneficio bruto de explotación (ebitda) creció un 15%, hasta 329,1 millones, mientras que la facturación se redujo un 6%, hasta 3.968,1 millones, por la caída de los precios del acero inoxidable.
La deuda financiera neta cerró el ejercicio en 620 millones, un 13% menos que al término de 2015.