
El bajo coste ha llegado al largo radio e Iberia prevé ponerse manos a la obra para ver cuál es la mejor estrategia para hacerle frente. La aerolínea low cost Norwegian ha lanzado sus primeros vuelos a América Latina desde Barcelona, entrando a competir en el mercado en el que la firma que preside Luis Gallego es líder. Así será la nueva clase Turista Premium de Iberia.
Aunque desde Iberia aseguran que el bajo coste en el largo radio todavía no es una amenaza (Ryanair todavía ve lejos la opción de cruzar el charco) y que no llegará a los niveles del corto radio, donde tienen el 50% del mercado tanto en España como en Reino Unido, lo cierto es que ya es una realidad que empieza a tener éxito por lo que ha entrado en su radar.
"Tenemos presentes los movimientos de las compañías de bajo coste en el mercado de largo radio. Veremos cuál es la mejor forma de competir con este fenómeno teniendo en cuenta que no podrá llegar a los niveles del corto radio por la estructura de costes y el tipo de demanda", aseguró el presidente de Iberia.
Y es que, según Gallego, el bajo coste tiene más problemas para triunfar en el largo radio que en el corto porque no tiene tantas ventajas en la utilización del avión, por el coste de combustible es muy superior y los costes laborales de alguna forma se diluyen
Rediseño del puente aéreo
En cuanto al negocio de corto radio, Iberia sigue trabajando en el rediseño del puente aéreo que une Madrid y Barcelona. El boom de las low cost y la penetración del AVE robó muchos pasajeros a esta opción que dejó de ser rentable, por lo que se pusieron a trabajar en una alternativa de servicio hace tiempo que todavía está pendiente de su aprobación.
"Se está perfilando cómo va a ser el puente aéreo. Si llegamos a tiempo, podremos anunciarlo para el verano que viene pero todavía estamos en ello", aseguró Gallego.
En cuanto al largo radio, la firma, que acaba de recuperar la ruta a Tokio tras 18 años cerrada, no tiene previsto abrir nuevas rutas en el corto plazo, ni en Asia ni en América Latina. Solo este año, Iberia ha empezado a volar a China, Puerto Rico, Japón, Sudáfrica, por lo que en los dos últimos años ha recuperado casi todas las rutas que había cerrado por la crisis y ha crecido un poco más.
"No descartamos seguir creciendo en Asia o Australia, pero no en el corto plazo. Entramos en un periodo de consolidación en el que toca hacer rentables las rutas, algo en lo que se tarda como dos o tres años", explicó el presidente y consejero delegado de la firma.
"Nuestro objetivo es hacer la Iberia sostenible y rentable más grande posible y aunque hay mercado en los que nos gustaría estar, son muy complicados y no es fácil", sentenció Gallego.
Apuesta por Japón
La apuesta por Japón forma parte de su plan de convertir a Iberia y Barajas en la puerta entre Asia y América Latina debido a la fuerte demanda ya que asegura que existen ventajas competitivas con respecto a los vuelos vía América del Norte, que implican largos trayectos y escalas complicadas.
"Tenemos el plan Madrid amigo que permite pasar una noche en la capital entre un vuelo y otro", explica Marco Sansavini, director comercial de la firma.
En el lado de los cierres, la compañía dejó volar a Estambul por la incertidumbre política y los atentados y a varios destinos en África por el desplome del crudo, rutas que no prevé retomar en el corto plazo. En cuanto al alza de la capacidad, la firma ha reducido el ritmo de crecimiento pero no prevé recortarla.
"Con la estructura de costes actual podemos capear el temporal", explicó Gallego, que sigue apostando porque el aumento de los ingresos, vía venta de billetes y complementarios, y el recorte de los gastos para llegar a las rentabilidad exigidas.
El futuro del área de mantenimiento
Dentro del plan de transformación de Iberia, la firma se está concentrando en rentabilizar el área de mantenimiento para "capturar más carga de trabajo" tanto dentro como fuera del grupo (dar servicio a terceros).
La reestructuración del negocio, que incluye un ERE voluntario de unas 1.000 personas para varias áreas, va en paralelo al desarrollo del diseño estratégico para el área de mantenimiento que está liderando Gallego para IAG.
"Tenemos previsto terminar en noviembre la parte del diseño estratégico y ver si tiene sentido que el mantenimiento se haga dentro o fuera del grupo IAG. En el caso de que compense hacerlo dentro habrá un proceso de consolidación entre Iberia y British Airways. En este punto, Iberia tiene varias ventajas para ganar peso en el negocio ya que los costes unitarios son muy atractivos porque tenemos los salarios del sur de Europa y está cerca para que las revisiones de los aviones sean rentables. Aunque, por otra parte, la libra tan baja beneficia a British Airways porque los precios caen", asegura Luis Gallego.