
La mexicana nombra a su 'número dos' mundial, Pablo Elizondo, nuevo responsable de la división. El cierre de la compra de Panrico se retrasa hasta el verano, a la espera del visto bueno de la CNMC
Bimbo está preparando su particular desembarco de Normandía. Pero en este caso, el lanzamiento de sus tropas no será por la costa de la Mancha, tampoco desde el Mediterráneo donde tiene su sede central en Barcelona, sino que lo hará desde Madrid.
El gigante mexicano ya ha comunicado a sus trabajadores que ha elegido a la capital española como centro de operaciones donde organizará su plan de crecimiento en Oriente Medio, Europa y África, pese a que en un primer momento había anunciado que pilotaría desde la Ciudad Condal su plan de expansión internacional y la conquista del mercado español. Así, el gigante mexicano deja huérfana a Barcelona, su plaza histórica desde los años sesenta y donde está la raíz de los fundadores del grupo. Aunque la sede fiscal se mantendrá en Cataluña y el director general de Bimbo Iberia, José Manuel González, seguirá en las oficinas de Diagonal Mar, se deberá reportar toda la actividad en la capital, según han explicado fuentes internas de la compañía.
En la capital se instalará a partir del próximo 13 de abril el número dos de la compañía a nivel mundial, Pablo Elizondo, que hasta ahora era director general adjunto de Grupo Bimbo. Elizondo trabajará codo con codo con Rosalio Rodríguez, que ocupaba el director de Operaciones del grupo. De modo que el presidente del consejo, director general e hijo del fundador, Daniel Servitje, trasladará gran parte de la cúpula directiva mexicana a España.
Mejor fiscalidad
Uno de los principales motivos es el administrativo, ya que la mayor parte de la actividad la tiene en Madrid con la planta de Las Mercedes, y la más importante y grande del país en Azuqueca, Guadalajara. Otro de los motivos del traslado respondería a la peor fiscalidad catalana y también al desafío secesionista que ha emprendido Cataluña en los últimos años. Fuentes autorizadas explican que hay directivos que han perdido la confianza en la región.
Y es que si antes Bimbo tenía un estrecho vínculo con algunas de las instituciones catalanas más importantes (su director general y fundador en España durante 30 años fue también miembro de la Junta Directiva del Barça con Núñez), esto ahora ha desaparecido. Por lo que esta decisión supone un duro golpe para su primera fábrica en España, la de Granollers (Barcelona), donde se están reduciendo los volúmenes de producción y se están despidiendo trabajadores temporales antes de la finalización de sus contratos. Según explican fuentes sindicales, el plan es cerrar esta fábrica como ya hicieron con la de Palma de Mallorca. La clausura de Granollers responde a la adquisición de Panrico, con la que incorporían una planta mayor en Santa Perpètua (Barcelona), a la espera de la Comisión Nacional de la Competencia (CNMC).
El propio grupo Bimbo de capital mexicano compró en 2011 la filial Bimbo España al fondo norteamericano Sara Lee por 115 millones de euros. En julio del año pasado cerró un acuerdo para la adquisición de su competidor Panrico, dueño de marcas como Bollycao o Donuts, pero la operación está pendiente todavía de la aprobación por parte de la CNMC. Bimbo cerró el acuerdo de compra del cien por cien de las acciones de la compañía por 190 millones de euros poco después de que la firma, propiedad hasta ahora del fondo Oaktree, llegara a un acuerdo con los sindicatos para evitar el despido de hasta 155 trabajadores.
Para esquivar precisamente problemas con Competencia, Bimbo dejó al margen el negocio de pan de molde, ya que la mexicana es el líder absoluto en el mercado español con una cuota del 39,6 por ciento mientras Panrico tiene el 9,7 por ciento de del mercado de pan de molde en España.
Con esta adquisición, que ya ha recibido un primer visto bueno de la CNMC y que se podría cerrar antes del verano, la azteca termina de merendarse al sector de la bollería en la península, donde acaba de abrir la panificadora más grande de Europa con una inversión de 50 millones y donde cuenta seis fábricas en España y Portugal.
?La adquisición de Panrico aún está sujeta a la autorización (visto bueno) de las autoridades regulatorias y se espera que concluya durante el segundo trimestre de 2016 y para garantizar la misma se ha realizado un depósito bancario por 15 millones de euros?, asegura la compañía en las cuentas de 2015.
Bimbo está presente en España y Portugal a través de su filial Bimbo Iberia, donde comercializa marcas como Bimbo, Silueta, Ortiz, Martínez, Pantera Rosa o Tigretón.
En todo el mundo, la compañía posee 166 plantas y unos 1.600 centros de venta en 22 países de América, Europa y Asia. Asimismo, tiene más de 2,4 millones de puntos de venta.