Barcelona, 8 jun (EFECOM).- El ministro de Industria, Joan Clos, ha defendido hoy la necesidad de que los fabricantes de vehículos con presencia fabril en España se orienten hacia gamas de productos más altas y con mayor valor añadido para hacer frente a la competencia internacional.
Clos ha participado en la inauguración de la 34 edición del Salón Internacional del Automóvil de Barcelona, acto en el que también ha estado presente el presidente de la Generalitat, José Montilla, el conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet, y el conseller de Interior, Joan Saura, entre otras personalidades.
El ministro ha destacado que en España el valor de la producción del sector de la automoción crece más que el número de unidades ensambladas, lo que implica un cambio de gamas.
"Nos interesa muchísimo afianzar este modelo", ha afirmado Clos, quien se ha referido a la automoción como un sector "estratégico" para España y "extremadamente competitivo".
Para garantizar la competitividad de los fabricantes afincados en el país, Clos ha prometido ayudas en formación de trabajadores, en la construcción de infraestructuras y en investigación y desarrollo (I+D), al tiempo que ha aplaudido la voluntad de diálogo que existe entre las direcciones de las compañías y los sindicatos, así como la "elevadísima" capacidad para adaptarse al entorno.
En cuanto a la posibilidad de que el Gobierno introduzca un impuesto que grave las emisiones de dióxido de carbono, el ministro ha asegurado que desde el Ejecutivo "se tendrá en cuenta" la preocupación que existe en el sector.
En este sentido, se ha comprometido a que el conjunto de la fiscalidad que soportan los vehículos no aumente y ha apostado por penalizar fiscalmente a los coches que contaminen más.
También se ha referido al cierre de la planta de Delphi en Puerto Real (Cádiz), que ha calificado de "accidente", y ha asegurado que en la industria auxiliar del automóvil "no se ha detectado una pérdida de competitividad".
Las autoridades han recorrido casi todos los pabellones de exposición del salón y han saludado a directivos de varias compañías, como el presidente de Seat, Erich Schmitt, y el vicepresidente de Recursos Humanos de la filial de Volkswagen, Ramón Paredes.
El salón, que ha servido para presentar cuatro novedades mundiales, abrirá sus puertas al público a partir de mañana y hasta el 17 de junio.
Participan 43 marcas en este salón, en el que destacan las ausencias de BMW y Porsche.
La feria dispone de 250.000 metros cuadrados brutos de superficie, 89 expositores directos y una previsión de igualar los 1,1 millones de visitantes registrados en la última edición de 2005 y en la que se batió el récord de asistencia.
En esta 34 edición se ahondará en las principales tendencias del sector, como el fenómeno de los coches híbridos -pensados para la ciudad pero con estructura de todoterreno-, de los vehículos más respetuosos con el medio ambiente y de los automóviles baratos, cuyo precio ronda siete mil euros. EFECOM
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