El Consejo de Administración de Enagás ha nombrado a Antonio Llardén Carratalá como nuevo presidente de la compañía en sustitución de Antonio González-Adalid. La decisión, tomada por unanimidad, ya fue apuntada por elEconomista, cuando desveló las luchas de poder que estaban teniendo lugar.
La presidencia de Enagás (ENG.MC) ha sido un puesto sobre el que habían puesto los ojos el anterior ministro de Industria, José Montilla, y el ex director de la Oficina Económica del Presidente del Gobierno y actual candidato a la Alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián.
Para sustitutir a González Adalid en el cargo sonaron con fuerza dos candidatos, Miguel Ángel Laseheras, presidente de Intermoney Energía y consejero de la empresa, y el presidente de la patronal Sedigás y director general de Gas Natural, Antoni Llardén, tal y como adelantó este diario. Llardén era el mejor colocado para sustituir a González Adalid en su cargo después de varios años de una eficiente gestión al frente del gestor técnico del sistema.
El actual presidente de Enagás logró en apenas cuatro años sacar a bolsa la compañía y llevarla desde poco más de seis euros por acción hasta más de 20 euros. Los títulos, no obstante, se han resentido de manera considerable desde que el ministerio cambió las reglas del juego y los accionistas han visto como sus títulos perdían en poco tiempo casi cinco euros por acción, una cantidad nada despreciable que ha puesto en alerta a los fondos de inversión.
