Madrid, 11 ene (EFECOM).- El sector eléctrico redujo el año pasado un 7,8 por ciento sus emisiones de CO2 gracias al aumento de la producción hidroeléctrica y nuclear, que no emiten gases de efecto invernadero, y a la menor aportación de las centrales de carbón y fuel, más contaminantes.
Las emisiones de CO2 de las instalaciones del régimen ordinario (excluidas energías renovables y cogeneración) se situaron el pasado ejercicio en 99 millones de toneladas, 8 millones de toneladas menos que en 2005, informó hoy la patronal eléctrica Unesa.
A pesar de este recorte de las emisiones, la producción eléctrica del régimen ordinario creció un 3,5 por ciento.
La disminución de las emisiones se debe en mayor medida al aumento de la producción hidroeléctrica, que aún está por debajo del nivel de un año hidráulico medio, a la recuperación de la producción nuclear, que descendió de forma excepcional en 2005, y a la mayor aportación de las centrales de ciclo combinado, que utilizan gas natural.
Como consecuencia de estos incrementos, se redujo la producción de las centrales de carbón y de derivados del petróleo, que son las que más contaminan. EFECOM
mam/rjc
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