Las aerolíneas son unas de las compañías más sensibles al aumento de costes que se derive el encarecimiento del petróleo, pero un adecuado esquema de coberturas les permite esquivar este auge de precios. IAG, matriz de compañías como Iberia, Vueling o British Airways, reconocía ayer, durante la presentación de sus resultados anuales que, pese a que el conflicto entre Rusia y Ucrania imprime incertidumbre a un sector que ya viene castigado en los últimos años por el Covid, esperan que el impacto del conflicto sea "muy limitado". Esto se debe, principalmente, a que, según las palabras del consejero delegado de Iberia, Javier Sánchez-Prieto, "estamos muy cubiertos" frente al alza del petróleo, "de los más cubiertos" del sector, señaló. En concreto, IAG tiene una cobertura del 70% para el primer trimestre y del 60% para 2022.
"Las aerolíneas americanas no tienen coberturas y otras como WizzAir tampoco", señalan. Otras aerolíneas, como Ryanair, tienen coberturas del 100% para su cuarto trimestre (de enero a marzo de 2021) era del 100%, mientras que para el conjunto del año 2023 (marzo 2022 a marzo de 2023) el porcentaje de cobertura es del 75%. En el lado opuesto está WizzAir que, en junio de 2021, decidió aprobar la política de 'no cobertura' para el periodo postCovid tras "evaluar los costes económicos y los beneficios", tal y como ellos mismos señalaron.
Más allá de las coberturas y los daños derivados de la subida de costes del petróleo, IAG considera que su operativa no se verá seriamente afectada. La compañía ha cancelado la única conexión con Rusia, operada por British Airways a Moscú, y modificará las rutas de sus vuelos a Delhi y Singapur para evitar sobrevolar el país tras las sanciones cruzadas que se han impuesto por parte de Londres y Moscú y que evitan las operaciones del contrario en sus espacios aéreos. "Como la operativa hacia Asia es muy reducida, podemos reprogramar los vuelos para no tener que sobrevolar Rusia", señaló Gallego.
IAG se recupera
Con la guerra entre Rusia y Ucrania como telón de fondo, IAG sigue dando pasos hacia la recuperación. El conglomerado hispano-británico redujo sus números rojos durante el ejercicio de 2021 y firmó 2.933 millones de pérdidas. Todo ello, mientras sigue mirando a la salida de la crisis del Covid y prevé que durante este 2022 se pueda recuperar un 85% de la capacidad.
En el lado de los ingresos, IAG registró un aumento del 8,3% durante el ejercicio 2021 hasta alcanzar los 8.455 millones frente a los 7.806 cosechados un año antes. En 2021, la capacidad de IAG, medida en asientos-kilómetro ofertados, decreció un 63,9% frente a 2019. Además, el coeficiente de ocupación de 2021 aumentó ligeramente comparado con el 63,8% de 2020.
En cuanto a los gastos, los totales de las operaciones bajaron de 15.257 millones en 2020 hasta 11.220 millones este año. "Estamos seguros de que se está produciendo una fuerte recuperación. Nuestros equipos en todo el grupo están aprovechando todas las oportunidades para desarrollar nuestro negocio mientras aprovechan el incremento significativo de las reservas que se produce tan pronto se levantan las restricciones a los viajes. El extraordinario trabajo y dedicación de nuestra gente ha sido clave para enfrentar esta crisis. A su vez, estamos siguiendo de cerca los recientes acontecimientos geopolíticos con el fin de gestionar un impacto potencial", señaló Gallego, CEO de IAG.
Iberia consiguió beneficios
Por aerolíneas, las españolas Vueling e Iberia fueron las que más operaron este 2021. En concreto, la de bajo coste con sede en Cataluña llegó al 53% de su capacidad de 2019 mientras que Iberia consiguió un 55,4% de las operaciones.
Aer Lingus operó la capacidad más baja con respecto a 2019, con un 24,4%, mientras que British Airways llegó al 28,3%. A nivel financiero, Vueling cerró 2021 con unas pérdidas de 262 millones frente a los 623 millones de números rojos cosechados en 2020. Iberia perdió 234 millones frente a los 759 de un año antes, si bien consiguió un resultado positivo de 82 millones en el último trimestre.
Air Europa, en el aire
La operación de compra de Air Europa por parte de Iberia sigue en el aire y sus perspectivas son cada vez peores. Tras presentar los resultados anuales, el CEO de IAG señalaba que eran conscientes de que "Air Europa estaba en conversaciones con otra aerolínea europea". Gallego fue más allá y reconoció que si "Air Europa llega a un acuerdo con otra aerolínea europea, sería un deal catastrófico para los intereses de España". Javier Sánchez-Prieto, presidente de Iberia, añadía que sería "muy mala noticia" por su impacto sobre el hub de Barajas, la carga o El Prat.
La operación se anunció en noviembre de 2019 por 1.000 millones. Tras el impacto del Covid, esta cantidad se redujo a 500 millones mientras la deuda de la aerolínea de los Hidalgo aumentaba. Las conversaciones iniciadas dos años antes terminaron por romperse a finales de 2021 y darse seis semanas para llegar aun acuerdo. "Por nosotros no va a ser", señaló Gallego, recordando que durante "más de cuatro años", ha sido IAG, a través de Iberia, los que han tirado para que la operación saliese adelante. Gallego recordó que, si bien se inyectaron 75 millones en Air Europa a finales de diciembre, "no existía un periodo de exclusividad". Esta cantidad, además de pagar la penalización por romper el acuerdo, servía para "abrir un periodo de renegociación".
"Los requerimientos habían cambiado", señala Gallego. "Globalia quería una inyección más inmediata y había riesgos económicos y legales que no estábamos dispuestos a asumir". Como adelantó elEconomista, la situación financiera de Air Europa le obliga a revertir su patrimonio negativo de más de 250 millones antes de junio, cuando vence la moratoria concursal.