
Jean-François Fallacher, consejero delegado de Orange España, consideró ayer "muy positivo" cualquier movimiento de consolidación que pueda producirse el mercado español de telecomunicaciones, tanto si su compañía tiene protagonismo en el proceso como si queda excluida. Así, el directivo eludió comentar rumores tras reconocer que existe "mucho ruido" e insistió en que todo lo que vaya en línea con la simplificación del mercado "será positivo para los operadores que estamos invirtiendo".
Al mismo tiempo, Fallacher lamentó el hecho de que los grandes OTT estadounidenses "no inviertan un euro en las redes" sobre las que operan. En su opinión, el alto número de jugadores "es un rasgo diferencial del mercado español respecto al resto de Europa", como también sucede con la existencia de un quinto, sexto y hasta un séptimo operador, que en el caso de España "no son nada pequeños".
En esa hipotética boda entre compañías, el CEO de Orange España consideró "muy complicado", cualquier movimiento de consolidación que afecte a Telefónica, debido a las más que probables limitaciones de competencia por parte de los reguladores españoles o comunitarios, ya sea la CNMC o la Comisión Europea.
A preguntas de elEconomista.es, Fallacher indicó que "este tipo de rumores de compras suelen producirse cada cierto tiempo, como ya ocurrió el pasado año por estas fechas, sin que finalmente sucediera nada". Ante ese panorama, Orange España apostó por prepararse "para el escenario básico", que consiste en el "retorno al crecimiento 2023, fortaleciendo los canales de venta en el caso de Jazztel y Simyo, reforzar Orange como marca Premium, y esforzarnos para cumplir lo que el grupo y el mercado espera de nosotros".
Por otra parte, Fallacher ha valorado el pasado 2021 como "un año de grandes transformaciones que se traducen en una notable reducción en la tasa de desconexión de clientes (churn), de cinco puntos de mejora en banda ancha fija y de 6 puntos en clientes móviles, todo ello "gracias a la mejora de la experiencia de cliente". El ejecutivo también ha destacado la fortaleza de las distintas marcas del operador y "el foco en la segmentación para crecer en número de clientes de valor". Asimismo, el CEO de Orange España incidió en el "incremento significativo de los ingresos por servicios y ebitda" en los dos últimos trimestres de 2021. Además, Fallacher ha explicado que "el segmento de empresas vuelve al crecimiento, lo que es una señal muy importante", tras recordar que la compañía "ha mantenido un nivel muy elevado de inversión, con 1.500 millones de euros destinados en la fibra y en el espectro 4G y 5G, para ofrecer un servicio premium para los clientes.
Mejora progresiva
Respecto a los resultados del pasado ejercicio, Orange España ha explicado que tras cuatro trimestres consecutivos de mejora en la tendencia, la filial ha cerrado 2021 con unos ingresos totales de 4.720 millones de euros en 2021, un 4,7% menos que el año anterior, debido al "entorno competitivo cada vez más complejo". Pese a ello, Orange España ha elevado de forma sostenida la facturación por servicios retail, tanto B2C como B2B (que incluye servicios convergentes, solo fijo y solo móvil), pasando de una caída del -10,2% en el primer trimestre a un -8,3% en el segundo, un -7,9% del tercero y un -5,4% en el cuarto. Ese indicador "confirma así la recuperación progresiva y sostenida de la tracción comercial de la compañía, gracias al buen desempeño de sus distintas líneas de negocio y el uso creciente de las redes de nueva generación por parte de sus clientes".
Además, el progreso comercial del operador se refleja también "en el crecimiento de la cartera de clientes de Orange en España, que sumó 152.000 nuevos clientes de fibra y 145.000 usuarios de móvil de contrato respecto al año anterior", según explica en un comunicado. Por todo ello, la compañía cerró el ejercicio 2021 con 20.357.000 clientes, de los cuales 16.325.000 son de telefonía móvil (10.720.000 de 4G y 886.000 de 5G) y 4.032.000 de banda ancha fija (con 3.507.000 que usan servicios sobre fibra óptica).