Vivendi tiene un objetivo claro, reinar en Europa, y está dispuesta a todo para conseguirlo. Sus últimos movimientos así lo demuestran. A finales de octubre solicitó autorización al Consejo de Ministros para aumentar su participación en Prisa hasta el 29,9%. En la actualidad su posición en la española es del 9,93%. Necesita el okey del Ejecutivo al pretender superar el 10%, ya que a mediados de 2020 se aprobó una medida que limitaba la entrada de capital extranjero en las compañías españolas afectadas por la crisis del Covid-19.
Este no es el único movimiento que ha realizado en las últimas semanas. A principios de diciembre hizo pública su intención de comprar el 17,5% de Amber Capital en Lagardère por unos 595 millones de euros para, ya de cara a 2022, lanzar una opa sobre el 100% de la compañía, según explicó la francesa en un comunicado. Hay que tener en cuenta que Amber Capital es el principal accionista de Prisa, posee casi el 30% del capital.
Una vez este movimiento se ha hecho efectivo Vivendi posee más del 45% de las acciones de Lagardère, que incluyen emisoras como RFM y Europa 1, revistas como Paris Match o editoriales como Hachette, Stock y Larousse. En España, es dueña de Alianza Editorial, Ediciones Salvat, Bruño y Anaya, entre otros sellos editoriales.

Pero, ¿cuáles son las intenciones del conglomerado francés? "Vivendi tiene una intención clara de ganar cuota en el mercado europeo y convertirse en líder de contenidos y comunicaciones. Su reciente anuncio sobre la elevación de la participación que mantiene en Prisa, desde el 9,94% hasta el 29,9%, es una prueba más de esta aspiración. Tiene sentido en un contexto en que la competencia para las compañías de media tradicional proviene de grandes tecnológicas como Netflix, Facebook o Amazon Prime", explica Esther Gutiérrez de la Torre, analista de Bankinter.
Para Sabadell las ganas de expandirse por Europa de Vivendi son también buenas para la española. "La noticia es muy positiva por la confianza que demuestra Vivendi en Prisa", apuntan desde la financiera.
Vivendi tiene claro que quiere dominar Europa y también tiene muy claro quiénes quiere que sean sus compañeros de viaje, de hecho, no todos le valen. Tanto, que en el último año y medio ha ido reduciendo su participación en Mediaset Italia hasta casi la mitad. Además, en los próximos cinco años venderá el 100% de las acciones que posee del grupo italiano, es decir, el 19,18% del capital. Al igual que ocurre con el resto de decisiones de la francesa, parece tener de su lado al mercado. "El acuerdo es positivo porque permite a Mediaset trasladar su sede a Holanda y continuar con su proyecto de crear un gigante de TV en abierto en Europa", resaltó en su momento el bróker Equita. Este gigante que auguran los expertos que creará Mediaset será uno de los principales competidores del gigante en el que se quiere convertir Vivendi.
Los pasos dados por Vivendi apuntan a que el conglomerado francés quiere centrar su negocio cada vez más en los medios de comunicación y dejar de lado otros. Sobre todo si se tiene en cuenta que en junio vendió un 10% de Universal Music valorado en 3.500 millones o que ha aceptado que el control de la red de líneas fijas de la compañía telefónica Telecom Italia caiga en manos del Gobierno italiano, aunque esto fue antes de que KKR lanzara una opa valorada en 10.800 millones de euros, una operación a la que Vivendi se ha mostrado reacio desde el principio.