
Globalvia y Roadis disputan con los grupos lusos Brisa y Ascendi la compra de la autopista Douro Litoral, en Portugal. Las cuatro concesionarias han sido invitadas por Strategic Value Partners (SVP) y los fondos de deuda que controlan la infraestructura desde hace dos años para presentar ofertas, según indican a 'elEconomista' fuentes financieras. Los propietarios han contratado a Rothschild como asesor financiero de la venta. Los potenciales compradores no hicieron comentarios.
Autoestradas do Douro Litoral (AEDL) es la concesionaria que explota los peajes de varios tramos de autopista (A41, A43 y A32) con una longitud de 73 kilómetros y que dan servicio al área metropolitana de Oporto. Brisa, propiedad desde 2020 de APG, NPS y Swiss Life AM, se adjudicó la concesión de la autopista en 2008 por un periodo de 27 años y con una inversión asociada de 1.000 millones de euros. La operadora portuguesa se endeudó entonces con 833 millones de euros para desarrollar el proyecto.
La operación está pilotada en el lado financiero por Rothschild y los vendedores también han contratado a VTM como asesor de tráfico y a PLMJ como asesor legal
Con la última crisis financiera, SVP y otros fondos adquirieron la deuda con descuentos agresivos. A comienzos de 2019, tras fracasar las negociaciones para refinanciar el pasivo, situado entonces en el entorno de los 700 millones, los fondos de deuda decidieron ejecutarlo y hacerse así con la propiedad de la concesionaria, alegando que Brisa había incumplido sus obligaciones. Aunque la gestora lusa impugnó la acción, el Gobierno del país la aceptó.
Ahora, casi tres años después, SVP, también presente en la deuda de las autopistas quebradas en España y que en los últimos años ha litigado con Ferrovial por la SH-130 de Texas, y sus socios han puesto a la venta el activo, que sigue en todo caso siendo explotado por Brisa, el mayor operador de autopistas de Portugal. De acuerdo con las fuentes financieras consultadas, "el activo no está limpio del todo y, por eso, solo han invitado a grupos estratégicos". Es el caso de la propia Brisa, de Ascendi, cuyo dueño es el fondo francés Ardian –que planea venderla en los próximos meses–, Globalvia, controlada por los fondos de pensiones USS, OPTrust y PGGM, y Roadis, propiedad del fondo canadiense PSP. Todas ellas tienen una presencia consolidada en Portugal. La operación está pilotada en el lado financiero por Rothschild y los vendedores también han contratado a VTM como asesor de tráfico y a PLMJ como asesor legal, según fuentes del mercado.
SVP ha estructurado el proceso en una sola fase vinculante y venden tanto la posición accionarial como de deuda, por lo que el comprador será quien tenga que estructurar la financiación del activo. Los cuatro grupos invitados han de presentar sus ofertas en diciembre.
Quieren comprar Ascendi
Globalvia y Roadis quieren comprar la segunda mayor concesionaria portuguesa, Ascendi. Su dueño, Ardian, planea venderla en los próximos meses. Su precio se estima en 1.000 millones de euros. Globalvia ya controla en Portugal la autopista de peaje mixto Transmontana A4 y el peaje en sombra de la A-23 Beira Interior y está pendiente de cerrar la adquisición de Douro Interior. Mientras, Roadis entró en Portugal en 2018 con la compra de una posición de control en Auto Estradas do Atlantico (AEA) y Auto Estradas do Litoral Oeste (AELO).