
Desde hace años, Papá Noel recibe una enorme cantidad de pedidos de productos de Apple para repartir en Navidad. Pero esta temporada se enfrenta a una cruda realidad: la compañía está bajo mínimos y buena parte de los aparatos que venderán este año tardarán semanas en llegar a los clientes.
Los pedidos de los productos más nuevos de la compañía (iPhone 13, iPad mini, iPad de novena generación, Apple Watch Series 7 y MacBook Pro) no se completarán hasta finales de noviembre o bien entrado diciembre. Incluso algunos dispositivos más antiguos, como el iMac anunciado en abril, el Mac Pro y algunas configuraciones más caras del MacBook Air, están experimentando retrasos.
Tener que esperar por un producto de Apple no es nada nuevo, dado que el lanzamiento anual de su iPhone y otros productos populares normalmente traen consigo largas filas y retrasos en las entregas. Pero este año, los problemas de las cadenas de suministro y la falta de chips que azota a todo tipo de sectores han agravado aún más los problemas. Y esa tormenta perfecta amenaza con socavar lo que podría ser el mayor trimestre de ventas de Apple en su historia.
Se espera que la compañía ingrese casi 120.000 millones de dólares en los últimos tres meses del año, un 7% más que el año anterior. Esa suma supera las ventas trimestrales combinadas de Best Buy, Costco Wholesale, Disney y Target, entre otros gigantes de EEUU.
En un año en el que Apple debería estar disfrutando del éxito en uno de sus mayores ciclos de actualización de productos, la crisis de oferta mundial es el "elefante en la habitación", dijo Dan Ives, analista de Wedbush Securities.
El iPhone, el producto estrella de Apple, que representa aproximadamente la mitad de sus ventas, es el caso de más alto perfil. Un mes después de salir a la venta, el iPhone 13 Pro es difícil de encontrar en todos los colores, configuraciones y tamaños que ofrece. Esto no es normal, según los empleados de Apple, algunos de los cuales reconocen que tienen que lidiar cada vez más con clientes enfadados.
Una persona que solicite esta semana un iPhone en la web estadounidense tendrá que esperar a entre el 18 de noviembre y el 26 de noviembre para recibirlo. Lo mismo vale para los iPads más nuevos de Apple. Y la escasez se extiende a las tiendas físicas de la compañía, y la mayoría de los puntos de venta tienen poca o ninguna oferta de la mayoría de los modelos.
La temporada tampoco va bien para otros gigantes tecnológicos. Google ya ha visto que muchos de sus nuevos modelos de Pixel 6 tienen agotadas las existencias, mientras que los dispositivos más recientes de Amazon no se lanzarán hasta finales de año, como pronto. La PlayStation 5 de Sony todavía llega a las tiendas de medio mundo a cuentagotas después de estar a la venta durante casi un año, y Samsung también ha advertido sobre problemas de escasez.