
Iberdrola se prepara para dar hoy un importante salto en Estados Unidos. Los accionistas de PNM Resources tendrán que decidir si respaldan la oferta presentada por la filial de la española para crear un grupo de más de 40.000 millones en activos.
La operación, que ya ha recibido el visto bueno de las autoridades de competencia y de inversión extranjera, sigue pendiente de los permisos regulatorios de varios Estados, así como varios correspondientes a organismos federales.
La eléctrica española además sigue creciendo en el país y acaba de alcanzar un acuerdo con Intel para suministrarle electricidad renovable durante los próximos 15 años mediante una nueva instalación solar fotovoltaica de 138 MW, que se está desarrollando en el Condado de Wasco, Oregón.
La compañía se une a otras 17 empresas y municipios que se han comprometido a comprar energía limpia a través del programa Green Future Impact, completando el objetivo de capacidad original de 300 MW y ya están solicitando otros 200 MW adicionales.
La instalación producirá una parte importante de la energía que alimenta las instalaciones de desarrollo y fabricación de tecnología avanzada que Intel tiene en Hillsboro, Oregón.
Iberdrola cuenta a día de hoy con una potencia instalada en Oregón de 1.180 MW, repartidos en 12 instalaciones. Al cierre de 2020, la eléctrica alcanzó una capacidad cercana a los 9 GW, la mayor parte renovable, y se consolida como el tercer operador eólico de Estados Unidos. La compañía cuenta con una dilatada experiencia en el PPAs y gestiona acuerdos a largo plazo en mercados como España, el Reino Unido, Estados Unidos, México y Australia, procedentes de proyectos eólicos terrestres y fotovoltaicos que suman una capacidad de más de 6.500 MW.
Fondos europeos
Por otro lado, Iberdrola cuenta con 150 iniciativas, que permitirán movilizar más de 21.000 millones e involucrar a cientos de empresas dentro de sus planes para los fondos europeos Next Generation.
Los proyectos permitirían generar 45.000 puestos de trabajo al año, un crecimiento económico de más del 1,5% del PIB, la mejora de la competitividad y de la balanza de pagos -entre 500 y 1.000 millones de euros/año- y la contribución al reto demográfico, ya que se incluyen más de 7.000 millones de euros en entornos rurales, tal y como explicó el presidente de la compañía, Ignacio Galán.