
Janssen ha anunciado el comienzo de la última fase del ensayo clínico de su vacuna. El comienzo se sustenta tras los resultados preliminares positivos del ensayo clínico fase 1/2a de la compañía, que demuestran que el perfil de seguridad y la inmunogenicidad tras una vacunación única. Este ensayo convivirá en el tiempo con el que se inició hace una semana en España (y que es de fase 2).
La compañía ha seguido ampliando su capacidad de producción y se mantiene en el camino para alcanzar su objetivo de proporcionar mil millones de dosis de vacuna al año. Tal y como avanzó este medio, Janssen se compromete a ofrecer, sin ánimo de lucro, una vacuna asequible para su uso de emergencia durante la pandemia y prevé que los primeros lotes de una vacuna frente a la Covid-19 estén disponibles tras su autorización para uso de emergencia a comienzos de 2021.
"Dado que la Covid-19 sigue afectando a la vida cotidiana de la población mundial, nuestro objetivo sigue siendo el mismo: aprovechar nuestro alcance mundial y la innovación científica de nuestra compañía para ayudar a poner fin a esta pandemia", ha declarado Alex Gorsky, presidente y director ejecutivo de Johnson & Johnson, multinacional de la que denpende Janssen.
"Como la mayor compañía de Salud del mundo, estamos aportando nuestros mejores recursos científicos y rigurosos estándares de seguridad, en colaboración con las agencias sanitarias, para acelerar la lucha contra esta pandemia. Este hito fundamental demuestra que nuestros esfuerzos dirigidos a conseguir una vacuna frente a la COVID-19 se basan en la colaboración y en un profundo compromiso con un proceso científico sólido", ha añadido.
La vacuna candidata frente a la Covid-19 de Janssen aprovecha la plataforma tecnológica AdVac® de la Compañía, que también se utilizó para desarrollar y fabricar la vacuna frente al virus del Ébola de Janssen aprobada por la Comisión Europea y para desarrollar sus vacunas candidatas frente al Zika, VRS y VIH. Con ella se estima que, de tener éxito, la vacuna será estable desde su puesta en el mercado durante 2 años a -20 °C y al menos durante tres meses a 2-8° C. Esto la hace compatible con los canales habituales de distribución de vacunas y no requiere nuevas infraestructuras para hacerla llegar a las personas que la necesitan.