
Un total de 25 proyectos han resultado beneficiarios de la primera convocatoria del Plan Moves para proyectos singulares, sobre más de 100 iniciativas que han superado la fase técnica. Habida cuenta de esta demanda, el Gobierno lanzará "muy próximamente" una segunda edición del programa de ayudas, duplicando su importe hasta los 30 millones de euros.
Así lo ha señalado la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, durante la presentación telemática de los resultados del programa -una vertiente del Plan Moves II-, celebrada esta mañana en el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (Idae). El director de este organismo, Joan Groizard, ha explicado que a la convocatoria se han presentado 130 proyectos, solicitando ayudas por 160 millones.
De esos 130 proyectos, más de un centenar han superado la fase de valoración técnica, realizada por una comisión interna del Idae, en la que han participado especialistas de varios ministerios: 33 para los entornos urbanos (orientados a las administraciones públicas, sobre todo ayuntamientos) y 72 en el capítulo de innovación y movilidad eléctrica, desde cargadores a integración de renovables o nuevos usos en las baterías de los vehículos.
Al final, sólo 25 han resultado agraciados, "de un modo muy repartido": 13 corresponden a la categoría de innovación y electromovilidad, y 12 a entornos urbanos. Los importes de los proyectos -las ayudas proceden del europeo Fondo de Desarrollo Regional- varían entre los 2,8 millones concedidos al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife y los 45.000 euros otorgados a la madrileña Chargik.
Proyectos para empresas y ayuntamientos
Durante la presentación, se han mostrado cuatro proyectos "excelentes", tres del ámbito de la innovación y otro de los entornos urbanos.
Los tres de innovación corresponden a las empresas Battery Logistic, con un proyecto que incorpora una estación de recarga móvil en un vehículo, de modo que es capaz de suministrar electricidad en cualquier lugar; a la firma Epic Power, por un sistema de recarga bidireccional entre un vehículo eléctrico y la red; y a la compañía Place to Plug, por un sistema que, basado en blockchain, permite al consumidor la interoperabilidad de los sistemas de recarga.
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha sido el representante de los proyectos para los entornos urbanos, con una iniciativa que aglutina distintas iniciativas -"un proyecto de proyectos, de ahí su singularidad"- para facilitar la movilidad urbana sostenible.