
La Cartera dirigida por Teresa Ribera prepara un Real Decreto para duplicar el peso de los biocarburantes en el transporte, desde el 7% alcanzado el año pasado hasta el 14% en 2030. El decreto parte de la transposición de normativa europea y se ha lanzado una consulta pública sobre su contenido, con el plazo de respuesta suspendido durante el estado de alerta; pregunta desde el establecimiento de hitos anuales hasta cuotas mínimas por tipo de combustible.
La normativa en vigor fija un objetivo de consumo energético final de los biocarburantes en el transporte del 10% en 2020 y según los últimos datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, publicados esta misma semana, el año pasado alcanzaron el 6,9%, prácticamente cumpliendo el hito establecido para el año, del 7%.
Con vistas a la próxima década, la Directiva 2018/2001, de 11 de diciembre, establece que cada Estado europeo debe obligar a los proveedores de combustibles a garantizar que la cuota mínima de biocombustibles en el transporte sea del 14 % en 2030. Dentro de esta cuota, los biocarburantes avanzados -producidos sin competir con la alimentación- y el biogás deben alcanzar, al menos, el 0,22% en 2022, el 1% en 2025 y el 3,5% en 2030.
A partir de esos requisitos, cada Estado tiene libertad para ir más allá o establecer requisitos y especificaciones particulares, motivo que impulsa al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) a lanzar una consulta pública previa a la elaboración del decreto que trasponga parcialmente la citada Directiva, que debe entrar en vigor antes del 30 de junio del año que viene.
En el último borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), el Miteco va mucho más allá de los requisitos europeos y plantea una penetración del 28% de las renovables en el transporte, y apunta que sin introducir medidas adicionales a las actuales nos quedaríamos en un 11%, por debajo de la exigencia europea.
En biocarburantes, sólo lo justo
El PNIEC no se propone ir más allá de lo que exige la Directiva con relación a los biocombustibles en cuanto a su penetración al final de la próxima década; la proporción adicional hasta el 28% les corresponde a los vehículos eléctricos -aspira a tener cinco millones circulando- y otras tecnologías, como el hidrógeno.
En todo caso, en la consulta pública, el Miteco pide varias aportaciones a los interesados, como una senda de penetración de los biocarburantes durante la década, indicando, como ejemplo, que alcancen el 10,5% en 2022, el 11% en 2023, el 11,5% en 2024 y el 12,5% en 2025.
Igualmente, pide opinión sobre incorporar la obligación a otros transportes distintos al de carretera, como la aviación; sobre lo apropiado de implantar cuotas para cada biocarburante o dejar una general; sobre los criterios de sostenibilidad y la posibilidad de aclararlos más; sobre los sistemas de verificación…
La consulta está abierta hasta el 6 de abril, pero este plazo se ha suspendido durante la vigencia del estado de alarma.